La regulación de los delitos de terrorismo en la L.O. 5/2010. ¿Son los terroristas nuestros “enemigos”? Especial referencia a la libertad vigilada

Del análisis de las más recientes reformas penales, como las operadas por la L.O. 7/2003 o la L.O. 5/2010, se desprende un afán por endurecer las penas y las condiciones de su ejecución, obstaculizar en la medida de lo posible el acceso a la libertad de ciertos individuos, ampliar los espacios de ri...

Full description

Autores:
Puente Guerrero, Patricia
Tipo de recurso:
Article of journal
Fecha de publicación:
2011
Institución:
Universidad Externado de Colombia
Repositorio:
Biblioteca Digital Universidad Externado de Colombia
Idioma:
spa
OAI Identifier:
oai:bdigital.uexternado.edu.co:001/7583
Acceso en línea:
https://bdigital.uexternado.edu.co/handle/001/7583
https://revistas.uexternado.edu.co/index.php/derpen/article/view/3071
Palabra clave:
terrorismo
Derecho Penal del enemigo
expansión del Derecho Penal
populismo punitivo
libertad vigilada.
Rights
openAccess
License
http://purl.org/coar/access_right/c_abf2
Description
Summary:Del análisis de las más recientes reformas penales, como las operadas por la L.O. 7/2003 o la L.O. 5/2010, se desprende un afán por endurecer las penas y las condiciones de su ejecución, obstaculizar en la medida de lo posible el acceso a la libertad de ciertos individuos, ampliar los espacios de riesgos jurídico-penalmente relevantes, y extender las intervenciones a periodos posteriores a la excarcelación. Las voces expertas —acalladas por medio de discursos populares y políticos alarmistas que no hacen sino magnificar el problema generando una sensación de inseguridad que no tiene por qué corresponderse con la realidad y puede derivar en una peligrosa pretensión de “riesgo cero” al más puro estilo del “Big Brother” orwelliano—, conceptualizan este fenómeno como una “expansión” del Derecho Penal, un “retorno a Von Liszt” y a su constructo de “inocuización” de los delincuentes “incorregibles”, cuyo máximo exponente es el denominado “Derecho Penal del enemigo”, y que amenaza con poner fin a los principios y las garantías que tanto han costado estructurar en el Estado de derecho.