Entre los dilemas económicos y la confianza ciudadana: salarios e inflación en México

En ocasiones, las políticas subsidiarias ayudan a solventar problemas inflacionarios, e indirectamente sirven para evitar protestas sociales y mantener o aumentar la confianza en el gobierno. Comparamos las relaciones entre salarios e inflación para los últimos tres sexenios en México. Para el perio...

Full description

Autores:
Andrade Rosas, Luis Antonio
Gaytán Alcala, Felipe
Bautista León, Andrea
Tipo de recurso:
Article of journal
Fecha de publicación:
2023
Institución:
Universidad Externado de Colombia
Repositorio:
Biblioteca Digital Universidad Externado de Colombia
Idioma:
spa
OAI Identifier:
oai:bdigital.uexternado.edu.co:001/15494
Acceso en línea:
https://bdigital.uexternado.edu.co/handle/001/15494
https://doi.org/10.18601/01245996.v26n50.03
Palabra clave:
Citizen Trust, social policy, minimum wages, inflation
D04, D31, D63, E24
Confianza ciudadana, política social, salarios mínimos, inflación, México, política social
D04, D31, D63, E24
Confiança cidadã, política social, salário mínimo, inflação, México, política social
D04, D31, D63, E24
Rights
openAccess
License
Luis Antonio Andrade Rosas, Felipe Gaytán Alcala, Andrea Bautista León - 2023
Description
Summary:En ocasiones, las políticas subsidiarias ayudan a solventar problemas inflacionarios, e indirectamente sirven para evitar protestas sociales y mantener o aumentar la confianza en el gobierno. Comparamos las relaciones entre salarios e inflación para los últimos tres sexenios en México. Para el periodo 2006-2012 el nivel de inflación no repercutió en un aumento salarial; en el 2012-2018 causó un aumento del 4% y desde el 2018 el aumento fue de 6.4%. Adicionalmente, estimamos el porcentaje de aceptación de cada gobierno con base en las políticas inflacionarias y subsidiarias usando un modelo logit. Los resultados muestran que la inflación impactó negativamente la aceptación gubernamental en 0.113%, mientras que el incremento salarial la aumentó en 0.108%. Respecto a cada gobernante, se destaca la aceptación del 79% del gobierno de turno, siendo la más grande en las últimas décadas.