La necrópolis de Usme

Al llegar al pueblo de Usme, por la carretera, a la margen derecha viniendo del centro de Bogotá, se encuentra el hallazgo arqueológico. No hay ningún letrero, solo las referencias de los habitantes locales que enseñan el lugar de la antigua Hacienda El Carmen, en donde se encuentra un gran cementer...

Full description

Autores:
Van Der Hammen Malo, María Clara
Tipo de recurso:
Part of book
Fecha de publicación:
2018
Institución:
Universidad Externado de Colombia
Repositorio:
Biblioteca Digital Universidad Externado de Colombia
Idioma:
spa
OAI Identifier:
oai:bdigital.uexternado.edu.co:001/5090
Acceso en línea:
https://bdigital.uexternado.edu.co/handle/001/5090
https://doi.org/10.57998/bdigital.handle.001.5090
Palabra clave:
Restos arqueológicos - Bogotá (Colombia)
Arqueología - Bogotá (Colombia)
Conservación de cuencas hidrográficas - Aspectos sociales - Bogotá (Colombia)
Desarrollo de recursos hídricos - Aspectos sociales - Bogotá (Colombia)
Rights
openAccess
License
http://purl.org/coar/access_right/c_abf2
Description
Summary:Al llegar al pueblo de Usme, por la carretera, a la margen derecha viniendo del centro de Bogotá, se encuentra el hallazgo arqueológico. No hay ningún letrero, solo las referencias de los habitantes locales que enseñan el lugar de la antigua Hacienda El Carmen, en donde se encuentra un gran cementerio precolombino. En 2007, mientras se realizaban trabajos de remoción de tierra en el marco del proyecto Ciudadela Nuevo Usme de Metro Vivienda, aparecieron restos óseos, se supo luego, precolombinos. En primera instancia, como cuentan varios pobladores, pensaron que se trataba de una fosa común, resultado del conflicto armado que se vivía en la región (Investigación Territorios del Agua). Tanto la comunidad como los trabajadores de la obra informaron del hallazgo al Instituto Colombiano de Antropología e Historia - ICANH y a MetroVivienda y se detuvo los trabajos de remoción. Se contrató a la Universidad Nacional de Colombia para iniciar un Plan de Manejo Arqueológico para toda el área. Luego, en el 2014, el terreno fue declarado área arqueológica protegida por el Instituto Colombiano de Antropología e Historia - ICANH. Durante las investigaciones que duraron tres años, el lugar era centro de gran actividad y recibía muchos visitantes. Ahora, unos años después de la declaratoria, no hay ninguna señal y no se ha logrado avanzar en la creación de un centro de información.