Dieta líquida rica en ácidos grasos, estrategia de alimentación para cerdos en el trópico

El uso de diferentes tecnologías y recursos relacionados con la alimentación de los cerdos se debe enfocar en un mejoramiento continuo de las condiciones de los animales, que satisfaga sus requerimientos nutricionales (en cantidad y calidad) y les permita un buen desempeño, lo cual se evidencia en l...

Full description

Autores:
Bolívar Sierra, Andrés Felipe
Tipo de recurso:
Article of journal
Fecha de publicación:
2021
Institución:
Universidad de los Llanos
Repositorio:
Repositorio Digital Universidad de los LLanos
Idioma:
spa
OAI Identifier:
oai:repositorio.unillanos.edu.co:001/2122
Acceso en línea:
https://doi.org/10.22579/22484817.739
Palabra clave:
pig production
energy sources
nutrition
producción porcina
fuentes de energía
nutrición
suinocultura
fontes de energia
nutrição
Rights
openAccess
License
Revista Sistemas de Producción Agroecológicos - 2021
Description
Summary:El uso de diferentes tecnologías y recursos relacionados con la alimentación de los cerdos se debe enfocar en un mejoramiento continuo de las condiciones de los animales, que satisfaga sus requerimientos nutricionales (en cantidad y calidad) y les permita un buen desempeño, lo cual se evidencia en los parámetros productivos y reproductivos, como también en la salud y el bienestar del hato. La nutrición es uno de los pilares que sustenta la producción de cerdos, ya sea para garantizar el producto final de buena calidad o por tratarse del componente de mayor peso en el costo final de producción. Los principales componentes que suplen los requerimientos energéticos de los cerdos son carbohidratos y lípidos. EI maíz es la principal fuente de energía utilizada en la alimentación porcina, contiene niveles de energía digestible y metabolizable de 3.5 y 3.3 Mcal/kg, respectivamente. Mientras que las grasas y aceites aportan 9.0 a 9.5 Mcal/kg de energía digestible, siendo consideradas como una muy buena fuente de energía, pero estos componentes lipídicos son adicionados tan solo en niveles de 3 a 5% en la dieta. Una diferencia que existe entre los componentes de la dieta se debe al incremento calórico (IC), representado por el aumento de la producción de calor después del consumo de alimento por parte del animal. Por otro lado, un problema muy común en el uso de grasas y aceites en la formulación de dietas es la rancidez. Factores como temperatura, enzimas, luz e iones metálicos pueden influenciar la formación de radicales libres que en contacto con oxígeno molecular lleva a la formación de un peróxido. La reacción con otra molécula oxidable induce la formación de hidroperóxido y otro radical libre. Los hidroperóxidos dan origen a dos radicales libres capaces de atacar otras moléculas y formar más radicales libres. Al romperse las moléculas formadas, generan productos de peso molecular más bajo como aldehídos, cetonas, alcoholes y esteres, los cuales son volátiles y responsables por la rancificación. Cuando la grasa está sujeta a oxidación y se torna rancia, reduce su palatabilidad y puede ser causa de problemas nutricionales y digestivos.