El parque Centenario de Ibagué Fragmentos y relatos en el espacio

"La investigación permitió verificar la ausencia sistemática de información a mediados del siglo XX, como consecuencia de las tensiones políticas bipartidistas enmarcadas en las causas y consecuencias del Bogotazo. En este sentido, mucha información en torno a 1950 ha sido cercenada, tanto las...

Full description

Autores:
Francel Delgado, Andrés Ernesto
Hormechea Cuéllar, Paola
Aparicio Rengifo, Reynaldo
Tipo de recurso:
Book
Fecha de publicación:
2024
Institución:
Universidad del Tolima
Repositorio:
RIUT: Repositorio U. Tolima
Idioma:
OAI Identifier:
oai:repository.ut.edu.co:001/3866
Acceso en línea:
https://repository.ut.edu.co/handle/001/3866
Palabra clave:
710 - Planificación del área y arquitectura del paisaje::712 - Arquitectura paisajística (diseño del paisaje)
Arquitectura
Arquitectura
Arte
Historia Urbana
Patrimonio
Rights
openAccess
License
http://purl.org/coar/access_right/c_abf2
Description
Summary:"La investigación permitió verificar la ausencia sistemática de información a mediados del siglo XX, como consecuencia de las tensiones políticas bipartidistas enmarcadas en las causas y consecuencias del Bogotazo. En este sentido, mucha información en torno a 1950 ha sido cercenada, tanto las colecciones de prensa a nivel local, nacional e internacional, como de las actas del concejo municipal y de los archivos planimétricos. Esta ausencia de documentos primarios, que nos permitirían acceder directamente a los protagonistas y sus obras, se suma a la ausencia de datos en prensa, que podrían conducirnos a identificar dinámicas, escenarios y comportamientos administrativos y populares con respecto al parque. Más aún, al realizar algunas entrevistas con expertos locales, los datos orales tienen tantas divergencias, que las deducciones abren muchas posibilidades más, tanto de claridad como de confusión. Por estos motivos, un resultado fundamental que acompaña a la destrucción sistemática de la información, es la imposibilidad de determinar un diseñador para el parque. Sin embargo, y como consecuencia de los factores que se presentan en la investigación, el parque Centenario es la expresión de unas ideas arquitectónicas, artísticas e ingenieriles que se transformaron en cada administración pública, en cada creador involucrado y en cada momento de conciencia histórica. Como resultado de esta conciencia que se ha materializado en diversos momentos, se afirma que el parque Centenario reúne el espíritu de la celebración del Primer Centenario de la Independencia de Colombia en 1910, el propósito de aprovechar las potencialidades de la quebrada El Lavadero o de Los Piojos a través de un barrio parque propuesto por Alberto Manrique Martin, Arturo Jaramillo Concha y Carlos Alberto Tapia en el proyecto de urbanización del barrio Belén en 1920, además del festejo del cuarto centenario de la fundación de Ibagué en 1950, la conmemoración de la Batalla de Boyacá en 1983 y la recuperación de la existencia histórica de la quebrada El Lavadero o de Los Piojos como elemento ordenador principal de la malla urbana de Ibagué, a partir del siglo XXI. Como medio de expresión de estas intenciones, se afirma también que la propuesta de un escenario musical a campo abierto para la ciudad, procede del artista plástico y diseñador industrial Julio Fajardo Rubio, que el diseño de las primeras escaleras corresponde al escultor y arquitecto huilense Jesús Antonio Molina Vega, que la dirección de los trabajos de algunas estructuras del parque estuvo a cargo del ingeniero Guillermo González Zuleta, con algunos aportes de diseño de Juvenal Moya Cadena, y que la propuesta de un parque lineal que abarcara la totalidad de la quebrada hasta su desembocadura en el río Chipalo fue concebida por el arquitecto Guillermo Silva Ospina. La intervención de estos creadores significó que un espacio urbano residual, que servía de límite y barrera entre el centro y el Panóptico hasta principios del siglo XX, se convirtiera en la expresión de una nueva sociedad que rescató los valores ambientales del valle de los ríos Combeima y Chipalo. En este sentido, el espacio de potreros y lavado de ropa durante la colonia, se transformó en un escenario lúdico arbolado que configuró la base infraestructural para la creación del Festival Folclórico Nacional en 1959. "