Importancia de una adecuada nutrición en pacientes con cáncer

Antecedentes: La nutrición es el proceso por el cual el cuerpo absorbe los alimentos y los usa para crecer, mantener la salud y reemplazar los tejidos. La buena nutrición es muy importante para la buena salud. Comer alimentos adecuados antes, durante y después del tratamiento contra el cáncer puede...

Full description

Autores:
Álvarez Meza, Fiamma María
Mendoza Sierra, Rosa Milena
Nieto Pérez, Milagro Del Carmen
Tipo de recurso:
Fecha de publicación:
2021
Institución:
Universidad Simón Bolívar
Repositorio:
Repositorio Digital USB
Idioma:
spa
OAI Identifier:
oai:bonga.unisimon.edu.co:20.500.12442/8046
Acceso en línea:
https://hdl.handle.net/20.500.12442/8046
Palabra clave:
Nutrición
Cáncer
Tratamiento
Alimentación
Nutrition
Cancer
Treatment
Feeding
Rights
restrictedAccess
License
Attribution-NonCommercial-NoDerivatives 4.0 Internacional
Description
Summary:Antecedentes: La nutrición es el proceso por el cual el cuerpo absorbe los alimentos y los usa para crecer, mantener la salud y reemplazar los tejidos. La buena nutrición es muy importante para la buena salud. Comer alimentos adecuados antes, durante y después del tratamiento contra el cáncer puede ayudar a los pacientes a sentirse mejor y más fuertes. Una dieta saludable incluye la ingesta de alimentos y líquidos adecuados que contienen nutrientes importantes (vitaminas, minerales, proteínas, carbohidratos, grasas y agua) que necesita el cuerpo humano. La terapia nutricional se utiliza para ayudar a los pacientes con cáncer a mantener un peso saludable, mantener la fuerza, mantener los tejidos corporales saludables y reducir los efectos secundarios durante y después del tratamiento. El cáncer y los tratamientos contra el cáncer a veces afectan el gusto, el olfato, el apetito y la capacidad de comer o absorber nutrientes de los alimentos. Esto puede provocar desnutrición, que es causada por la falta de nutrientes esenciales. El abuso de bebidas alcohólicas y la obesidad aumentan el riesgo de desnutrición. La desnutrición hace que los pacientes se sientan débiles, cansados, incapaces de combatir las infecciones o completar el tratamiento del cáncer. Cuando el cáncer crece o se propaga, la desnutrición tiende a empeorar. Obtener la cantidad adecuada de proteínas y calorías es importante para curar, combatir infecciones y obtener suficiente energía. Objetivo general: Describir la importancia de una adecuada nutrición en un paciente con cáncer. Metodología: Se realizó una búsqueda de información, a través de las bases de datos: Revista Cubana de Medicina, European Journal of Cancer (Ed. Española), Scielo y Sciencedirect. Se filtraron los artículos publicados entre el año 2016 hasta el 2021. También se usaron páginas web tales como alimmenta.com. Conclusiones: Sabemos que la alimentación es algo que realizamos y necesitamos diariamente los seres vivos, y la ausencia o excedencia del mismo pues ocasiona alteraciones en los organismos hasta incluso llegar a causar enfermedades o empeorarlas como en el caso del cáncer y su tratamiento. Existiendo diversos tumores, algunos de ellos (más que todos los gastrointestinales) alteran la estabilidad nutricional o metabolismo en los pacientes llegando a impedir un tratamiento óptimo en ellos. Esto puede ser debido a un aumento de las necesidades metabólicas y poca ingesta de alimentos. El apoyo nutricional del paciente oncológico es mejor determinarlo precozmente y así evitar que proceda a complicaciones nutricionales y de absorción secundarios al tratamiento, como un síndrome de malabsorción. También resaltamos el hecho de que una alteración metabólica puede ser sistémica (producida por reacción química propias del cuerpo que no llevan a cabo la fisiología del metabolismo, ya sea por la misma patología que presenta o no), o también como complicación al tratamiento que recibe. Ya que, en este último, como con todos los tratamientos, los resultados no son los mismos para dos personas distintas por lo que puede generar síntomas, como nauseas o vómito, que no favorecen, sino que empeoran en la nutrición del paciente produciendo a futuro una predisposición en el paciente oncológico a producir una patología secundaria al tumor que ya presenta y empeorando su primer diagnóstico y su estabilidad en pro a mejorar.