La unión marital de hecho

Antes ele ahondar- en el tema de la "Unión Marital de Hecho", que en la actualidad se ha tutelado con norma propia, en pro de la familia y cada uno de sus miembros, es preciso recordar que nuestra Carta Magna en su artículo 42, sabiamente recoge las distintas formas de establecer la famili...

Full description

Autores:
Daza García, Cesar Augusto
Tipo de recurso:
Fecha de publicación:
1996
Institución:
Universidad Simón Bolívar
Repositorio:
Repositorio Digital USB
Idioma:
spa
OAI Identifier:
oai:bonga.unisimon.edu.co:20.500.12442/11078
Acceso en línea:
https://hdl.handle.net/20.500.12442/11078
Palabra clave:
Derecho
Derecho matrimonial
Matrimonio
Derecho de familia
Derecho civil
Rights
restrictedAccess
License
Attribution-NonCommercial-NoDerivatives 4.0 Internacional
Description
Summary:Antes ele ahondar- en el tema de la "Unión Marital de Hecho", que en la actualidad se ha tutelado con norma propia, en pro de la familia y cada uno de sus miembros, es preciso recordar que nuestra Carta Magna en su artículo 42, sabiamente recoge las distintas formas de establecer la familia, cuando dice: Se constituye por vínculos naturales o jurídicos, por la decisión libre de un hombre y una mujer de contraer matrimonio o por la voluntad responsable de conformarla. "Continua en su inciso cuarto: "Las relaciones familiares se basan en la igualdad de derechos y deberes de la pareja y en respeto recíproco entre todos sus integrantes." No se puede negar, como dice Engels, que el concubinato fue primero que el matrimonio, pues el simple apareamiento de los sexos, resultado del instinto de las especies, originaba el amañamiento y, en muchos de los casos el concubinato estable y permanente. Luego de la decadencia del imperio romano, la doctrina cristiana, entra a regir los destinos morales y políticos del mundo, surge la consideración pecaminosa de toda unión extramatrimonial y consecuencialmente a las personas y los hijos dados de esa unión eran vistos como despreciables. La Revolución Francesa, buscó una solución más justa, igualando a la familia natural con la legítima, pero no por mucho tiempo, ya que la reacción de esta revolución volvió las cosas a su estado primitivo, surgiendo el Código de Napoleón (matriz de la mayoría de los Códigos Modernos), desconociendo las uniones irregulares y los derechos y obligaciones de los padres e hijos naturales.