Situación de los hijos extramatrimoniales y legítimos a la luz dentro del ordenamiento civil

Este trabajo tiende a demostrar que todas las discriminaciones del ser humano, en razón de su filiación han sido totalmente borradas de nuestro sistema jurídico. Al quedar incluidos los hijos extramatrimoniales dentro de la familia de sus padres de la misma manera que los legítimos, se destruye la p...

Full description

Autores:
Eulalia Idalides, Eulalia Idalides
Tipo de recurso:
Fecha de publicación:
1986
Institución:
Universidad Simón Bolívar
Repositorio:
Repositorio Digital USB
Idioma:
spa
OAI Identifier:
oai:bonga.unisimon.edu.co:20.500.12442/8718
Acceso en línea:
https://hdl.handle.net/20.500.12442/8718
Palabra clave:
Derecho de familia
Hijos extramatrimoniales
Derechos civiles
Rights
restrictedAccess
License
Attribution-NonCommercial-NoDerivatives 4.0 Internacional
Description
Summary:Este trabajo tiende a demostrar que todas las discriminaciones del ser humano, en razón de su filiación han sido totalmente borradas de nuestro sistema jurídico. Al quedar incluidos los hijos extramatrimoniales dentro de la familia de sus padres de la misma manera que los legítimos, se destruye la principal diferencia entre la legitimadas y la extramatrimonialidad. Con la expedición de la Ley 29 de 1982, nuestro país se ha limitado a cumplir compromisos internacionales contenidos en la DECLARACION UNIVERSAL DE LOS DERECHOS DEL HOMBRE, el PACTO INTERNACIONAL DE DERECHOS CIVILES Y POLITICOS y la CONVENCION AMERICANA DE LOS DERECHOS HUMANOS. Tal como lo veremos más adelante en el desarrollo del presente trabajo. Igualmente con la expedición de esta nueva ley queda demostrado que ningún ser humano puede ser discriminado, humillado, ni ofendido por su origen. Y en cuanto a la creencia equivocada de que la desigualdad entre el hijo legítimo y el extramatrimonial debía mantenerse en procura de fortificar y respetad la institución matrimonial ha caído en desuetud ante los avances innegables acerca de la justicia social; ya que la falta contra el estado de derechos consagrado en el matrimonio es de los padres y en consecuencia es una necesidad actual dotar de normas adecuadas nuestro régimen jurídico para poder deducir mayor responsabilidad de tales padres. Esta discriminación que existía en nuestra legislación con respecto a los hijos legítimos y extramatrimoniales antes de la creación de la Ley 29 de 1982 no tenía razón de ser, ya que en nuestro país muchas parejas recurren a la unión libre y presciden del matrimonio. Como consecuencia de dicho fenómeno, la cantidad de hijos extramatrimoniales (o naturales) crece sin cesar y constituye, hoy por hoy, un alto porcentaje con respecto a los hijos matrimoniales o legítimos.