El cuerpo en las transferencias sexuales en la ciudad de Santiago de Cali

En la ciudad de Santiago de Cali, por lo general la venta del cuerpo de la mujer ha tenido lugar en varios espacios, que se han creado para el disfrute de la población, en su mayoría masculina, pero en los últimos años estos lugares de transferencia sexual han tenido un mayor incremento en la ciudad...

Full description

Autores:
Culchac Patiño, Andrea Elianeth
Guzmán Escarria, Gissel Andrea
Tipo de recurso:
Trabajo de grado de pregrado
Fecha de publicación:
2019
Institución:
Universidad del Valle
Repositorio:
Repositorio Digital Univalle
Idioma:
spa
OAI Identifier:
oai:bibliotecadigital.univalle.edu.co:10893/26610
Acceso en línea:
https://hdl.handle.net/10893/26610
Palabra clave:
Trabajadoras sexuales
Prostitución femenina
Cali (Valle del Cauca)
Rights
openAccess
License
Atribución-NoComercial-SinDerivadas 4.0 Internacional (CC BY-NC-ND 4.0)
Description
Summary:En la ciudad de Santiago de Cali, por lo general la venta del cuerpo de la mujer ha tenido lugar en varios espacios, que se han creado para el disfrute de la población, en su mayoría masculina, pero en los últimos años estos lugares de transferencia sexual han tenido un mayor incremento en la ciudad, cambiando la configuración espacial de la misma, es decir con el paso de los años los establecimientos de transferencia sexual han aumentado de tal manera que ha generado un cambio en la percepción que tienen los ciudadanos, en este caso de los caleños, hasta tal punto que ha cambiado la forma de pensarse la ciudad. Además, en la actualidad se ha cambiado la idea del sexo, ya no es un tabú hablar del mismo, se ha incursionado en nuevas prácticas que generen placeres sexuales y que son ejercidos por distintos actores de las sociedades, pero, aun con las nuevas prácticas sexuales se sigue estigmatizando la prostitución como algo que lo realizan mujeres sin pudor, siguen habiendo juicios, más que todo de carácter moral, hacia las mujeres que venden su cuerpo, aunque este trabajo ya sea reconocido como cualquier otro. De la misma manera con el paso de los años también ha habido una configuración de los cuerpos que se venden, pues estos han tenido que modificarse, moldearse y adecuarse, para resultar más atractivos en el mercado sexual, teniendo que cumplir con unos cánones de belleza, estereotipos que la misma sociedad ha idealizado y ha implementado, además han tenido que adquirir ciertas prácticas de seducción, implementando desde un lenguaje no verbal, que haga que el consumidor del cuerpo se sienta atraído y excitado por movimientos, miradas o sonrisas que tenga la trabajadora sexual hacia él. Es así, como estas prácticas configuran el espacio en el cual se desarrolla el proceso de seducción y se consuma el acto sexual, es decir los establecimientos en donde se mercantiliza el cuerpo. Por otra parte, la percepción que tienen los involucrados varía de acuerdo al espacio que configuran, no es igual la percepción de las trabajadoras sexuales que están en el lugar casi a diario y que en su labor de seducir al hombre, adecuan el espacio para ser observadas, que la percepción que tiene el consumidor que visita el lugar esporádicamente, y es quien compra el cuerpo, y entra en el juego del erotismo y la seducción.