Los Herodes de todos los tiempos siempre condenan a muerte a los niños y niñas.

La perícopa de Mateo 2, 1 – 20 nos muestra dos figuras en particular: Herodes quien como emperador tiene el poder y la autoridad para decidir sobre los habitantes de su imperio y Jesús quien aun siendo un recién nacido le representa un peligro. Se ve la ausencia de temor de Dios, el afán de reconoci...

Full description

Autores:
Araque Rodríguez, Wilson Alexander
Tipo de recurso:
Tesis
Fecha de publicación:
2020
Institución:
Claretiana
Repositorio:
Claretiana
Idioma:
spa
OAI Identifier:
oai:repositorio.uniclaretiana.edu.co:123456789/1794
Acceso en línea:
https://repositorio.uniclaretiana.edu.co/handle/123456789/1794
Palabra clave:
Violencia
Niñez
Herodes
Medellín
Rights
restrictedAccess
License
http://purl.org/coar/access_right/c_16ec
Description
Summary:La perícopa de Mateo 2, 1 – 20 nos muestra dos figuras en particular: Herodes quien como emperador tiene el poder y la autoridad para decidir sobre los habitantes de su imperio y Jesús quien aun siendo un recién nacido le representa un peligro. Se ve la ausencia de temor de Dios, el afán de reconocimiento y de conservar el poder en Herodes al ordenar la muerte de los menores de dos años nacidos en la región donde se cree nacería el mesías según los textos sagrados, orden dada en contra de los niños que pudiesen ser un peligro para conservar su mandato, de igual manera se ve la cobardía de los sumos sacerdotes y letrados los cuales guardan silencio ante tan atroz orden. Belén de Judá a pesar de ser físicamente pequeña es elevada por la literatura bíblica como una ciudad grande al recibir la promesa por medio del profeta de que ella no será la menor en importancia de las ciudades de Judá, pues de ella nacerá el caudillo que apacentará el pueblo (Mt 2, 6). El estudio exegético de la perícopa nos permite dar una mirada al momento actual de una ciudad como Medellín la cual es una ciudad emblemática de Colombia pero que está rodeada de violencia, lo que termina reflejado en las muertes violentas incluso de menores de dos años que son cubiertas con el silencio y la indiferencia de los ciudadanos del común, de los entes administrativos y religiosos, llegando al desconocimiento de estas muertes por órdenes de quienes se aferran al poder igual que Herodes y que a pesar del tiempo lo siguen encarnando, ante esta problemática la solución no es de grandes inversiones económicas, sino de un verdadero compromiso social y moral, compromiso que no existió en Herodes ni existe en los líderes actuales.