El seguimiento de Jesús, en lucas 9,57-62, una propuesta transgresora frente a todo elgalismo

Existen diferentes documentos sobre el seguimiento a Jesús, donde la mayoría de los casos lo enmarcan exclusivamente dentro de la vida consagrada, la presente investigación basada en una aproximación exegética de Lucas 9; 57 – 62 y apoyada por algunas fuentes bibliográficas, permite evidenciar que e...

Full description

Autores:
Hernández Sierra, Wualter Norvairo
Tipo de recurso:
Tesis
Fecha de publicación:
2020
Institución:
Claretiana
Repositorio:
Claretiana
Idioma:
spa
OAI Identifier:
oai:repositorio.uniclaretiana.edu.co:123456789/1795
Acceso en línea:
https://repositorio.uniclaretiana.edu.co/handle/123456789/1795
Palabra clave:
Legalismo
Vida consagrada
Rights
restrictedAccess
License
http://purl.org/coar/access_right/c_16ec
Description
Summary:Existen diferentes documentos sobre el seguimiento a Jesús, donde la mayoría de los casos lo enmarcan exclusivamente dentro de la vida consagrada, la presente investigación basada en una aproximación exegética de Lucas 9; 57 – 62 y apoyada por algunas fuentes bibliográficas, permite evidenciar que el seguimiento a Jesús implica algunos requerimientos, por eso es importante a la luz del evangelio observar el actuar de un Jesús histórico, y las actitudes particulares de los hombres y mujeres que decidieron seguirlo en su tiempo. Dentro de esos requerimientos se encuentra el abandono total, es decir el desprendimiento a todo lo material o a las comodidades que el medio le pueda ofrecer, el rompimiento con vínculos afectivos o apegos que impiden la toma de decisiones maduras y radicales, un seguimiento en la libertad, son condiciones y los más importante de todo: el deseo de seguir anunciando el reinado de Dios. Un seguimiento que no está limitado a una institución, grupo o estilo de vida determinado. El seguimiento de Jesús en la actualidad se convierte en un reto, más aún con todas las comodidades y estereotipos que la sociedad presenta ahora, es asumir una vida muy particular y autónoma, en la libertad, fraternidad y desde la cotidianidad, teniendo en cuenta que no es institucionalizado, es decir que no se necesita ser religiosa, religioso o sacerdote, basta con tener las ganas de seguirle y vivir como un auténtico cristiano: sin sumisión a normas o leyes, llevando a la praxis el evangelio actuando únicamente por convicción.