Sedimentos: ecologías performativas

Los sedimentos moldean el paisaje, y a la vez, son moldeados por el trazo humano. Trazos de un puente ferroviario inacabado han modificado la desembocadura del río Guarinó en el río Magdalena, cambiando completamente la morfología del lugar. La coreografía del paisaje ribereño refleja la fragilidad...

Full description

Autores:
Aguilar Barón, Valentina
Tipo de recurso:
Trabajo de grado de pregrado
Fecha de publicación:
2024
Institución:
Universidad de los Andes
Repositorio:
Séneca: repositorio Uniandes
Idioma:
spa
OAI Identifier:
oai:repositorio.uniandes.edu.co:1992/73541
Acceso en línea:
https://hdl.handle.net/1992/73541
Palabra clave:
Sedimentos
Ecologías
Performatividad
Río Magdalena
Honda
Ferrocarril
Coreografías del paisaje
Vestigios
Renaturalización
Ecosistema
Arquitectura
Rights
openAccess
License
Attribution-NoDerivatives 4.0 International
Description
Summary:Los sedimentos moldean el paisaje, y a la vez, son moldeados por el trazo humano. Trazos de un puente ferroviario inacabado han modificado la desembocadura del río Guarinó en el río Magdalena, cambiando completamente la morfología del lugar. La coreografía del paisaje ribereño refleja la fragilidad de su trazo inestable: una línea de agua que se dibuja y desdibuja constantemente como resultado de las condiciones climáticas y las ecologías circundantes. ¿Cómo proyectar ante un lugar en donde lo único permanente es el cambio? La línea ferroviaria trazada abruptamente por el ser humano ahora funciona como umbral entre tiempo, historia y lugar. Un trazo que redirige hacia la torre de biofiltración pesquera, un artefacto tan performático como el paisaje. Un eje renaturalizado que reconecta las ecologías del paisaje: personas, geografía, botánica e hidrodinámicas fluviales. Un sistema que acumula sedimentos históricos, biológicos y antrópicos para restaurar un ecosistema en decadencia. El proyecto funciona como una verticalización de las dinámicas horizontales del río, desde la materia hasta las personas que lo habitan. Se convierte en punto de encuentro para la preservación de la tradición local al que se le atribuirán responsabilidades ecosistémicas: acumular sedimento, cultivar vegetación y bio-filtrar el agua lluvia. Un paisaje reconciliador en el que un trazo del pasado pueda ser una nueva oportunidad para conciliar comunidad y ecosistema.