Aún Quieto

Este proyecto es un análisis de la violencia simbólica y física hacia la identidad latinoamericana, específicamente colombiana. Conviene subrayar que el proyecto es una respuesta a la investigación sobre el ejercicio de superioridad dentro del contexto laboral que existe por parte de agentes extranj...

Full description

Autores:
Hernández Toro, Susana
Tipo de recurso:
Trabajo de grado de pregrado
Fecha de publicación:
2021
Institución:
Universidad de los Andes
Repositorio:
Séneca: repositorio Uniandes
Idioma:
spa
OAI Identifier:
oai:repositorio.uniandes.edu.co:1992/54040
Acceso en línea:
http://hdl.handle.net/1992/54040
Palabra clave:
United Fruit Company
Discriminación en el trabajo
Corrupción administrativa
Huelga de las Bananeras (Colombia)
Conflictos laborales
Chiquita Brands International
Diseño
Rights
openAccess
License
http://creativecommons.org/licenses/by-nc-nd/4.0/
Description
Summary:Este proyecto es un análisis de la violencia simbólica y física hacia la identidad latinoamericana, específicamente colombiana. Conviene subrayar que el proyecto es una respuesta a la investigación sobre el ejercicio de superioridad dentro del contexto laboral que existe por parte de agentes extranjeros, principalmente desde el caso de la United Fruit Company, actualmente conocida como Chiquita Brand. Particularmente, se tenía la intención de crear una narrativa que le devuelve el poder a las masas del sur, a los trabajadores maltratados que son completamente ignorados y desconocidos por los compradores extranjeros que consumen productos manchados de sufrimiento. Aun quieta en el arte, como en el supermercado, encontramos mucha violencia pintada en la pared. Masacres, guerra, maltrato laboral y una identidad completamente caricaturizada es lo que queda en los ya no alimentos, sino productos. Una masacre podría ocurrir en el corredor de un supermercado y lo único que quedaría es desorden en las estanterías, que se recogerá, limpiara olvidará. Así pues, una mayoría "allá abajo" alimenta a los pocos de arriba sin que estos se volteen en ningún momento de su plato para ver a esos "otros". Por un lado, este pequeño grupo de privilegiados y esclavos del consumo ignoran el contenido doloroso dentro de sus comidas, no lo pueden digerir, no importa cuantos conservantes, procesos o destrucciones haya pasado, no importa que no quede nada de la realidad dentro de su empaque. Por otro lado, se encuentra este producto, víctima de su propio valor comercial, de su serialización defectuosa y a punto de moverse. A su lado, una exótica variedad de alimentos aún en su árbol se encuentran el poder en el error. Así está a punto de empezar una revolución de los muchos que no han sido civilizados, de los que todavía tienen madre, pero no tienen ni un peso. Sin duda, su salvajismo los salvó, su ignorancia los empoderó, porque al devolver la mirada a sí mismos encontraron el poder