"Paisaje y azar" un paisaje maquinal

El objeto del estudio que aquí se presenta, es el paisaje en general, y la intervención que ha tenido en la configuración del paisaje urbano de una ciudad como Medellín en los últimos 45 años, en particular. La observación está centrada allí, ya que desde los años 70, Medellín se va convirtiendo en...

Full description

Autores:
Londoño, Federico
Tipo de recurso:
Doctoral thesis
Fecha de publicación:
2019
Institución:
Universidad Nacional de Colombia
Repositorio:
Universidad Nacional de Colombia
Idioma:
spa
OAI Identifier:
oai:repositorio.unal.edu.co:unal/76298
Acceso en línea:
https://repositorio.unal.edu.co/handle/unal/76298
http://bdigital.unal.edu.co/72525/
Palabra clave:
Paisaje
Paisaje Urbano - Medellín (Colombia)
Rights
openAccess
License
Atribución-NoComercial 4.0 Internacional
Description
Summary:El objeto del estudio que aquí se presenta, es el paisaje en general, y la intervención que ha tenido en la configuración del paisaje urbano de una ciudad como Medellín en los últimos 45 años, en particular. La observación está centrada allí, ya que desde los años 70, Medellín se va convirtiendo en un referente de ciudad moderna, un nuevo modelo de ciudad donde el cambio en la estructura urbana, dinamiza inevitablemente la mirada de sus habitantes; pero de manera contrastante, se puede advertir que la manera como se planifica y direcciona esta nueva espacialidad en la ciudad, tiene un operar que hace indistinguible los rincones, las aceras, las calles, las plazas, e inclusive, a quienes la transitan día a día, pero que en últimas, son quienes estructuran la función del habitar. Y es precisamente allí, en esas acciones un tanto conectadas con el azar, donde se puede reconocer la forma del paisaje que esta tesis explora y propone como alternativa a la intervención, a la modelación del espacio y el territorio, el paisaje como máquina y praxis. Por tanto, en el proceso de investigación que aquí se presenta a través de este ejercicio de escritura, estas transformaciones se contextualizan y analizan, a través de la tensión constante que se vive en el entorno urbano principalmente, entre una mirada y práctica intervencionista y la vida individual y social con la que se teje su día a día, su praxis. Luego de reconocer el paisaje como un objeto de conocimiento que se construye, que, para los fines de la investigación, debe ser pensado fuera del juego a que conduce el concepto de objeto técnico, enfrenta la pregunta de hasta dónde el espacio público se puede planificar y hasta dónde resulta de las interacciones sociales y económicas. Como lo pone en evidencia la historia del concepto, que se expone en el capítulo primero, hacia el siglo XVI, se consideraba que el paisaje conservaba una forma sólida, que era duradero, algo que podía mantenerse a través del tiempo como fondo, perspectiva y exterioridad; cualidad que precisamente usaron muchas disciplinas para intentar identificarlo o caracterizarlo. En la actualidad, por su uso, se reconoce y pone en evidencia su carácter ‘líquido’, de objeto in-forme, maleable, un flujo en sí mismo, que contribuye en la modificación de la ciudad. Esta disolución del concepto, la ausencia de pautas estables, es el rasgo permanente que lo intensifica, y por lo tanto, del discurso que acompaña esta tesis. Como resultado del seguimiento de esas modificaciones, se muestra que, en nuestros días, la utilidad del paisaje, su uso y operatividad, debe orientarse a tender estructuras móviles, líquidas, redes, ejes que organizan la vida social en torno suyo, pero que no son casi nunca instituciones estables, sino pautas de instantes, ondas, situaciones, ritmos, confluencias, fluctuaciones. Así, el paisaje, deja de ser exclusivamente el terreno del nombrar, etiquetar y contemplar lo físico de un entorno o ambiente; para pasar al campo dinámico del producir relaciones, modificar prácticas y representaciones, de las que inevitablemente será un generador: relaciones azarosas entre los habitantes, los transeúntes, paseantes, viajeros; relaciones efímeras, de todo tipo de contacto. En este sentido, es más viable hablar de sucesiones de paisajes, sobre todo, al ocuparse de ciudades en las que las estructuras que modifican el entorno son variables, el clima mutable y las relaciones sociales singulares; y que se constituyen con el tiempo como estabilizaciones en torno a adquisiciones anteriores y que se almacenan en un mismo; el del paisajismo. El paisajismo ha tomado como saber un puesto central en el desarrollo de nuevas formas del habitar el mundo, en el diseño, remodelación, creación y planeación de sitios y lugares donde se desenvuelve la vida humana. Bajo esta perspectiva, se muestra que hoy la apuesta del paisaje y paisajismo se juega en nuestra ciudad en el espacio libre, en el espacio público, en el espacio colectivo, por cuanto es el único capaz de resolver el conflicto, la situación crítica de los territorios, la complejidad de sus problemáticas. En estos entres, está la apuesta, el reto mayor de la proyectística contemporánea, y reside la potencialidad del espacio, que es colectivo, de proyectar el paisaje como motor, como dispositivo de actuación, que expresa la evolución de un lenguaje compositivo y efectúa una referencia directa en la ciudad. Quienes laboran en el ámbito de la proyectística, hallan en el paisaje su directo referente formal que no deja lugar a dudas sobre la hibridación entre figura en movimiento y fondo.