Sab, el romanticismo de la desilusión y su hálito eufórico

El ideal romántico de amor influye en las mentalidades femeninas más ilustradas del siglo XIX; tal es el caso de Carlota, la protagonista de la novela abolicionista Sab (1841), novela de la autora cubana Gertrudis Gómez de Avellaneda (1814-1873). Carlota, una mujer que se duele de la condición de es...

Full description

Autores:
Van der Linde, Carlos Germán
Tipo de recurso:
Article of journal
Fecha de publicación:
2008
Institución:
Universidad Nacional de Colombia
Repositorio:
Universidad Nacional de Colombia
Idioma:
spa
OAI Identifier:
oai:repositorio.unal.edu.co:unal/53682
Acceso en línea:
https://repositorio.unal.edu.co/handle/unal/53682
http://bdigital.unal.edu.co/48304/
Palabra clave:
3 Ciencias sociales / Social sciences
86 Literaturas española y portuguesa / Literatures of specific languages and language families
Gómez de Avellaneda, Gertrudis, 1814-1873
Sab (Novela cubana)
Perspectiva de género
Escritoras cubanas
Biografías
Romanticismo
Masculinidades
Esclavitud
Rights
openAccess
License
Atribución-NoComercial 4.0 Internacional
Description
Summary:El ideal romántico de amor influye en las mentalidades femeninas más ilustradas del siglo XIX; tal es el caso de Carlota, la protagonista de la novela abolicionista Sab (1841), novela de la autora cubana Gertrudis Gómez de Avellaneda (1814-1873). Carlota, una mujer que se duele de la condición de esclavitud en que están subyugados los negros en la isla de Cuba, ha sido educada por su padre, un hombre también romántico que no dirige su vida por el «positivismo». Es precisamente esa mujer que hemos denominado ilustrada por inspirar su conciencia política bajo los principios republicanos de la igualdad, la libertad, y la fraternidad, la que vive, en gran parte de la novela, una ilusión romántica. Hasta que al final, el romanticismo se enfrenta con la realidad masculina, positivista e impositiva de su esposo y sociedad general. Es en este punto donde toma conciencia del sofisma vivido y asume la desilusión como una postura de vida, desilusión que está reforzada simbólicamente por el retiro al claustro de su amiga Teresa.