La simpatía y el espectador imparcial en la teoría moral de Adam Smith

Una perspectiva del pensamiento de Adam Smith ha pasado desapercibida para la historia: su Teoría de los sentimientos morales. Si se revisa la teoría filosófica del padre del neoliberalismo, no parece tan claro que sea el monstruo que proclama la vigencia del libre mercado y concibe al ser humano co...

Full description

Autores:
Sánchez, Carolina
Tipo de recurso:
Article of journal
Fecha de publicación:
2014
Institución:
Universidad Nacional de Colombia
Repositorio:
Universidad Nacional de Colombia
Idioma:
spa
OAI Identifier:
oai:repositorio.unal.edu.co:unal/64897
Acceso en línea:
https://repositorio.unal.edu.co/handle/unal/64897
http://bdigital.unal.edu.co/65920/
Palabra clave:
1 Filosofía y psicología / Philosophy and psychology
Adam Smith
Egoísmo
Espectador
imparcial
Imaginación
Motivaciones para actuar
Simpatía
Rights
openAccess
License
Atribución-NoComercial 4.0 Internacional
Description
Summary:Una perspectiva del pensamiento de Adam Smith ha pasado desapercibida para la historia: su Teoría de los sentimientos morales. Si se revisa la teoría filosófica del padre del neoliberalismo, no parece tan claro que sea el monstruo que proclama la vigencia del libre mercado y concibe al ser humano como un ser esencialmente egoísta. Para Smith, en realidad, la naturaleza humana se mueve en un delicado equilibrio entre razón y emoción: tenemos una disposición natural para acoger moralmente al otro (y ser acogidos por él). De acuerdo con esta idea de lo humano, los criterios para juzgar con la mayor corrección posible la conducta de los otros son la simpatía basada en la imaginación y la figura del espectador imparcial. Preocupándose por estos mecanismos morales, Smith cree que nuestras sociedades funcionarán como una buena orquesta, en la cual nuestras vidas serán bellas y armoniosas; no seremos una sociedad de solistas eternos que solo abogan por el interés propio. Este texto presenta un esbozo general de la ética de Smith y sus dos propuestas centrales: la simpatía y el espectador imparcial. A partir de estos conceptos, se desarrolla la idea de que la moral no es exclusivamente racional, sino que depende de la interacción social y de la experiencia.