Mujeres y guerras en Colombia

La discusión sobre el tema de la guerra y la mujer puede ser vista desde tres niveles de análisis: el primero se refiere a la teoría que fundamenta la guerra, perteneciente a la estructura patriarcal que perpetúa la distribución tradicional de roles entre hombres y mujeres, partiendo de la división...

Full description

Autores:
Bernal Olarte, Angélica
Tipo de recurso:
Article of journal
Fecha de publicación:
2001
Institución:
Universidad Nacional de Colombia
Repositorio:
Universidad Nacional de Colombia
Idioma:
spa
OAI Identifier:
oai:repositorio.unal.edu.co:unal/53077
Acceso en línea:
https://repositorio.unal.edu.co/handle/unal/53077
http://bdigital.unal.edu.co/47583/
Palabra clave:
3 Ciencias sociales / Social sciences
36 Problemas y servicios sociales, asociaciones / Social problems and social services
Guerra
Estructura Patriarcal
Roles de Género
Público-Privado
Actores Armados
Maternidades
Virilidad
Ciudadanía
Imaginarios Sociales
Rights
openAccess
License
Atribución-NoComercial 4.0 Internacional
Description
Summary:La discusión sobre el tema de la guerra y la mujer puede ser vista desde tres niveles de análisis: el primero se refiere a la teoría que fundamenta la guerra, perteneciente a la estructura patriarcal que perpetúa la distribución tradicional de roles entre hombres y mujeres, partiendo de la división público-privado. El segundo, sustentado en teorías feministas, intenta re-escribir la historia para contar cómo han participado las mujeres, pero cuestionando la guerra como medio de resolución de conflictos. Por último, la historia, aquella contada de tal modo que las mujeres casi nunca se encuentran en los campos de batalla, apareciendo tan solo como participantes indirectas desde los roles tradicionales asignados socialmente. En la teoría que fundamenta la guerra se considera, de entrada, la división público-privado, fundamento de la asignación de roles: las mujeres en la esfera de lo privado, el hogar, cuidadoras de esposos e hijos; los varones en el espacio público, encargados de la economía, la política y, por supuesto, de la guerra. Esta asignación de roles, enraizada en los más profundo de la mayor parte de culturas humanas, ha hecho de la guerra una cuestión pública (por tanto de hombres). Ellos son protagonistas, sujetos, actores directos (guerreros, soldados). Las mujeres, por el contrario, han servido como botín de guerra, instrumento para debilitar al enemigo, medio de pago o intercambio y protectoras de la vida de los guerreros.