¿qué papel juega la definición de la eudaimonía en la concepción del bien humano de aristóteles?

Aristóteles propone una concepción del bien humano que determina (hasta con un cierto grado de precisión) cómo hemos de ser, actuar y en general vivir. Tal concepción se logra, según él, definiendo el bien humano, y en EN 1.7 lo define como “una actividad del alma según la virtud”. Esta definición n...

Full description

Autores:
Velásquez, Beatríz Alejandra
Tipo de recurso:
Article of journal
Fecha de publicación:
2009
Institución:
Universidad Nacional de Colombia
Repositorio:
Universidad Nacional de Colombia
Idioma:
spa
OAI Identifier:
oai:repositorio.unal.edu.co:unal/29107
Acceso en línea:
https://repositorio.unal.edu.co/handle/unal/29107
http://bdigital.unal.edu.co/19155/
Palabra clave:
bien humano
argumento de la función
puntos de partida
lo propiamente humano.
Rights
openAccess
License
Atribución-NoComercial 4.0 Internacional
Description
Summary:Aristóteles propone una concepción del bien humano que determina (hasta con un cierto grado de precisión) cómo hemos de ser, actuar y en general vivir. Tal concepción se logra, según él, definiendo el bien humano, y en EN 1.7 lo define como “una actividad del alma según la virtud”. Esta definición no brinda información acerca de cómo ser y actuar, por lo que parece no contener la concepción esperada del bien, lo cual sí logra la teoría de la virtud presentada en libros posteriores. ¿Qué papel juega entonces la definición de la eudaimonía en la concepción del bien de Aristóteles? Mientras unos intérpretes consideran dicha definición como fundamento de la concepción del bien de Aristóteles, para otros aquella admite concepciones opuestas del bien humano. Develando, pues, los supuestos del argumento que define la eudaimonía, muestro, en primera instancia, que la definición es compatible solamente con la concepción del bien de EN 2-6, sin ser su fundamento y, en segunda instancia, que las tesis de dicho argumento son más pertinentes de lo que parecen desde una lectura aislada de EN 1.7, y que las objeciones que más suelen planteársele están desenfocadas.