El transporte de Colombia en blanco y negro

Colombia, encuentra rezagada su infraestructura de transporte para enfrentar la apertura de sus mercados y participar de la globalización: mientras en la dirección norte sur hemos olvidado las mayores ventajas para el transporte de carga que ofrecen los medios ferroviario y fluvial frente al modo ca...

Full description

Autores:
Duque Escobar, Gonzalo
Tipo de recurso:
Work document
Fecha de publicación:
2008
Institución:
Universidad Nacional de Colombia
Repositorio:
Universidad Nacional de Colombia
Idioma:
spa
OAI Identifier:
oai:repositorio.unal.edu.co:unal/3245
Acceso en línea:
https://repositorio.unal.edu.co/handle/unal/3245
http://bdigital.unal.edu.co/1693/
Palabra clave:
38 Comercio, comunicaciones, transporte / Commerce, communications and transportation
33 Economía / Economics
Colombia
Café
Aeropuerto
Cartagena
Pánamax
Buenaventura
Transporte
Invías
Manizales
Colombia
Carga
Ferrocarril
Occidente
Magdalena
Urabá
Tribugá
Antioquia
Bogotá
Medellín
Cali
Valle
Tolima
Ipiales
Nariño
Tuquerres
Yopal
Panamá
Costa Atlántico
Pacifico
Mar Océano
Aeronáutica
Economía
Camión
Carreteras
Vías
Carretero
Blanco Negro
Carga Contenedor
Problemática
Posibilidades
Fluvial
Férreo
FFCC
Logística
Mercado
Aéreo terrestre
Economía
Transportes
Rights
openAccess
License
Atribución-NoComercial 4.0 Internacional
Description
Summary:Colombia, encuentra rezagada su infraestructura de transporte para enfrentar la apertura de sus mercados y participar de la globalización: mientras en la dirección norte sur hemos olvidado las mayores ventajas para el transporte de carga que ofrecen los medios ferroviario y fluvial frente al modo carretero, en el sentido transversal falta desarrollar ejes viales de mejores especificaciones para conectar los mayores centros de producción al Pacífico y salvar a más bajo costo las cordilleras. Por carecer de visión mercantil, tampoco hemos transformado en competitivas las ventajas comparativas para el transporte marí­timo asociadas a la presencia territorial del país en la cuenca de los dos océanos donde reside la economía planetaria, ni la fortaleza de Colombia dimidiando los rutas aéreas entre Nueva York y Santiago y entre Los Ángeles y Rí­o de Janeiro. Y tras olvidar el impacto de los ferrocarriles cafeteros de la década de 1920 comparable al del Canal de Panamá, después de la "crisis del 29" entramos al medio carretero para que luego de seis décadas apenas hayamos logrado reconocer el dominio sobre la órbita geoestacionaria y los mares, y construir con esfuerzo un medio carretero tan ineficiente que el sector privado debe destinar la mitad de sus costos logísticos a cubrir costos de transporte