Mortalidad consecuencia de las quemaduras en el campo de marte
Eduardo Abondano, de cinco años de edad, es hoy el único testigo que nos queda en el Servicio, de todos los que sufrieron quemaduras en la horrible catástrofe del 24 de julio, en el campo militar de Santa Ana.A este Servicio entraron, el mismo día del siniestro, veinte quemados y traumatizados. A mi...
- Autores:
-
Leyva Pereira, Lisandro
- Tipo de recurso:
- Article of journal
- Fecha de publicación:
- 1938
- Institución:
- Universidad Nacional de Colombia
- Repositorio:
- Universidad Nacional de Colombia
- Idioma:
- spa
- OAI Identifier:
- oai:repositorio.unal.edu.co:unal/41092
- Acceso en línea:
- https://repositorio.unal.edu.co/handle/unal/41092
http://bdigital.unal.edu.co/31189/
- Palabra clave:
- Quemaduras
historias clínicas
- Rights
- openAccess
- License
- Atribución-NoComercial 4.0 Internacional
Summary: | Eduardo Abondano, de cinco años de edad, es hoy el único testigo que nos queda en el Servicio, de todos los que sufrieron quemaduras en la horrible catástrofe del 24 de julio, en el campo militar de Santa Ana.A este Servicio entraron, el mismo día del siniestro, veinte quemados y traumatizados. A mi particularmente me toco asistir a tres pacientes más en la Clínica de Salud del Doctor Peña, y fuera de estos tuve ocasión de conocer los que el doctor Eduardo Cubides Pardo, mi jefe de clínica, trato entre su clientela particular. Por rara coincidencia vi en la clínica del doctor Peña los diez quemados con gasolina en el accidente de una de las fábricas que funcionan en Bogotá. Además, en mi carácter de cirujano de las Empresas Unidas de Energía Eléctrica, trate un caso de quemadura profunda producida por el corto circuito en una línea de alto voltaje. Patentes en la memoria los conocimientos de la experiencia dolorosa: que estos casos me han dejado, los he escogido como tema para esta primera lección, después de las vacaciones del Centenario. |
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