Cuidado te mochan la cabeza: circulación y construcción de un rumor en la frontera amazónica de Colombia, Perú y Brasil

“Y Estados Unidos, ¿por qué tendrá tanta plata? – Porque muchas cabezas de gente matan… ja, ja, ja, ja, ja, ja” Esa fue la respuesta de don Faustino a la pregunta que yo le hacía, y si bien en ese momento nos reímos, para él, así como para muchos otros, este rumor del cortacabezas es un asunto serio...

Full description

Autores:
Cure Valdivieso, Salima
Tipo de recurso:
Fecha de publicación:
2005
Institución:
Universidad Nacional de Colombia
Repositorio:
Universidad Nacional de Colombia
Idioma:
spa
OAI Identifier:
oai:repositorio.unal.edu.co:unal/9605
Acceso en línea:
https://repositorio.unal.edu.co/handle/unal/9605
http://bdigital.unal.edu.co/6524/
Palabra clave:
3 Ciencias sociales / Social sciences
39 Constumbres, etiqueta, folclor / Customs, etiquette and folklore
98 Historia general de América del Sur / History of ancient world; of specific continents, countries, localities; of extraterrestrial worlds
Rumor
Cortacabezas
Trapecio amazónico
Alteridad
Indígenas del Amazonas
Rights
openAccess
License
Atribución-NoComercial-SinDerivadas 4.0 Internacional
Description
Summary:“Y Estados Unidos, ¿por qué tendrá tanta plata? – Porque muchas cabezas de gente matan… ja, ja, ja, ja, ja, ja” Esa fue la respuesta de don Faustino a la pregunta que yo le hacía, y si bien en ese momento nos reímos, para él, así como para muchos otros, este rumor del cortacabezas es un asunto serio que representa un real temor. Este rumor circula desde mediados de la década de los ochenta entre pobladores, mayoritariamente indígenas pero también mestizos, que habitan sobre la ribera del gran río Amazonas, en el espacio de triple frontera Brasil-Colombia-Perú, y que habla de unos “gringos” que atacan a los indígenas para extraerles sus órganos, particularmente la cabeza, para fines, precisamente, del enriquecimiento y rejuvenecimientos de los mismos gringos. En un principio, según me comentó la gente, los cortacabezas andaban por tierra, se desplazaban y seguían a las personas en sus chagras y caminos, pero desde hace algunos años aparecen por el aire, provistos de trajes especiales, dólares, navajas, ganzúas, líquidos y máquinas de alta tecnología que les permiten volar, iluminar, perseguir y paralizar a las personas, para finalmente extraerles su cabeza y algunos otros órganos.