Diseño de una estrategia de cobertura para mitigar el riesgo cambiario del sector caficultor de los municipios de Ocamonte y San Gil

Alrededor de los años 1730 llega a Colombia los originarios granos de café, los cuales se le atribuyeron a la comunidad de los jesuitas. Los principales cultivos crecieron en la zona oriental de país y en 1835 tuvo lugar la primera producción comercial y según los registros los primeros 2560 sacos s...

Full description

Autores:
Melgarejo Hernández, Marly Johanna
Campos Castro, Ferney Hernando
López Araque, Erika
Tipo de recurso:
Trabajo de grado de pregrado
Fecha de publicación:
2019
Institución:
Universidad Autónoma de Bucaramanga - UNAB
Repositorio:
Repositorio UNAB
Idioma:
spa
OAI Identifier:
oai:repository.unab.edu.co:20.500.12749/14739
Acceso en línea:
http://hdl.handle.net/20.500.12749/14739
Palabra clave:
Financial engineering
Financial analysis
Financial managenment
Investigation
Currency risk
Coffee sector
Derivatives
Price
Commercialization
Exterior change
International financial market
Exports
Análisis financiero
Ingeniería financiera
Gestión financiera
Investigación
Cambio exterior
Mercado financiero internacional
Exportaciones
Riesgo cambiario
Sector caficultor
Derivados
Precio
Comercialización
Rights
License
http://creativecommons.org/licenses/by-nc-nd/2.5/co/
Description
Summary:Alrededor de los años 1730 llega a Colombia los originarios granos de café, los cuales se le atribuyeron a la comunidad de los jesuitas. Los principales cultivos crecieron en la zona oriental de país y en 1835 tuvo lugar la primera producción comercial y según los registros los primeros 2560 sacos se exportaron desde la Aduana de Cúcuta. Con la llegada de este grano al país y con el transcurrir del tiempo Colombia logro consolidarse como el segundo productor de café en los años de 1930. Históricamente el café es uno de los productos más consumidos a nivel mundial, entre 2017-2018 “se absorbieron 162.2 millones de sacos” (Clavijo,2018). Para el 2018 la federación nacional de cafeteros, se enfocó en hacer una caficultura más competitiva y rentable pero que a su vez redujera el impacto ambiental y mejorara las condiciones de sus productores. (FNC,2018). Es desde entonces que surge la importancia de mantener los cafetales renovados para lograr una caficultura más sostenible y con un grado alto de competitividad frente a otros países exportadores de ese grano. Según la federación nacional de cafeteros, para el año 2018 había en el país “550.000 familias productoras, 903.951 hectáreas, 664.045 fincas”. De estos el 96% son pequeños cultivadores. En los últimos años, el sector cafetero ha tenido altibajos por cuenta de la volatilidad en los precios internacionales del grano y de la moneda americana. Dicha materia prima para finales del 2018 cuando se creía que el mercado mundial estaría dando precios internos de $800.000 carga debido a las abundantes cosechas, terminaron llegando a precios mínimos de $687.000 carga y con una devaluación del peso-dólar del 5%. (Clavijo, 2018). Una devaluación mayor quiere decir que por la misma cantidad de dólares, se tendrán menos pesos y por lo tanto el cafetero recibe menos dinero. San Gil se posesionó en el 2018 como el segundo productor de café, siguiendo valle de san José, el páramo y Ocamonte. Al rededor del 70% de los productores son pequeños caficultores. (Núñez, 2019). A pesar de los altos cultivos que tienen los municipios objetivos de esta investigación, se han tenido que enfrentar a diferentes retos producto del precio del grano y además de los cambios de la moneda norte americana. Dichos retos han sido producto de la carencia de información sobre los mercados, además viven en una constante lucha para enfrentar la pobreza debido a su dependencia de la agricultura para su sustento y tiene un acceso limitado a los productos financieros lo que hace que sean menos competitivos frente a otros sectores. Por consecuente estos factores nombrados anteriormente causan impacto negativo en los ingresos de los caficultores puesto que en momentos de devaluación o incertidumbre del dólar sus ingresos se han visto disminuidos y han incurrido en pérdidas. Por todo lo anterior es que surge la necesidad de diseñar de una estrategia de cobertura para mitigar el riesgo cambiario del sector caficultor teniendo como enfoque los municipios de Ocamonte y San Gil. Logrando proteger la tendencia desfavorable del tipo de cambio y obteniendo una estabilidad en los resultados financieros para los pequeños caficultores de estos municipios.