Estrategias de cuidado al paciente con alteración de la salud mental enmarcado en la teoría de relaciones interpersonales y la enfermería basada en la evidencia

En Colombia la salud mental es definida como “un estado dinámico que se expresa en la vida cotidiana a través del comportamiento y la interacción de manera tal que permite a los sujetos individuales y colectivos desplegar sus recursos emocionales, cognitivos y mentales para transitar por la vida, tr...

Full description

Autores:
Ardila Álvarez, Alima Valentina
Tipo de recurso:
Trabajo de grado de pregrado
Fecha de publicación:
2018
Institución:
Universidad Autónoma de Bucaramanga - UNAB
Repositorio:
Repositorio UNAB
Idioma:
spa
OAI Identifier:
oai:repository.unab.edu.co:20.500.12749/12445
Acceso en línea:
http://hdl.handle.net/20.500.12749/12445
Palabra clave:
Nursing
Care of the sick
Medicine
Patient care
Mental health
Interpersonal relationships
Psychiatric disorders
Patient education
Quality of health care
Nursing care
Mental disorders
Enfermería
Atención al enfermo
Medicina
Educación al paciente
Calidad de la atención en salud
Cuidados de enfermería
Trastornos mentales
Cuidado del paciente
Salud mental
Relaciones interpersonales
Trastornos psiquiátricos
Rights
openAccess
License
http://creativecommons.org/licenses/by-nc-nd/2.5/co/
Description
Summary:En Colombia la salud mental es definida como “un estado dinámico que se expresa en la vida cotidiana a través del comportamiento y la interacción de manera tal que permite a los sujetos individuales y colectivos desplegar sus recursos emocionales, cognitivos y mentales para transitar por la vida, trabajar y establecer relaciones significativas que contribuyan a la comunidad” (1); este concepto permite determinar que la salud mental está directamente relacionada con el comportamiento, el desarrollo de relaciones interpersonales y la interacción con el medio en la cotidianidad, siendo el resultado de la interpretación y/o percepción de los pensamientos, emociones, creencias y demás contenidos de nuestra mente; las cuales se encuentran íntimamente afectadas por factores genéticos, congénitos, biológicos y socioculturales. Por lo anterior, es importante reconocer y entender los conceptos de trastorno mental y problema mental; el primero se caracteriza por alteraciones en el pensamiento, percepción, sentimientos, comportamientos y disfuncionalidad lo cual impide el desempeño eficaz del rol en las diferentes actividades de la vida diaria; el problema mental afecta la interacción con terceros y el medio además provoca cambios conductuales significativos que interfieren en la cotidianidad; no obstante estos no generan un deterioro significativo (1). Según la encuesta del Consorcio Internacional de Epidemiologia Psiquiátrica se estima que el 40,1% de la población colombiana entre 18 y 65 años ha sufrido, está sufriendo o sufrirá alguna vez en la vida de trastornos psiquiátricos diagnosticados; siendo la ansiedad la enfermedad mental predominante (19,5%), seguido de los trastornos del estado de ánimo (13,3%), trastornos por control de impulsos (9,3%) y los relacionados con el consumo de sustancias psicoactivas (9,4%). Los trastornos mentales en Colombia afectan especialmente a la población joven (niños, adolescentes y adultos jóvenes) situación que empeora en gran medida el pronóstico de la productividad académica y económica de la población; La prevención de la salud mental es fundamental para el desarrollo sostenible del país, ya que los trastornos mentales son frecuentes, afectan a dos de cada cinco personas adultas en Colombia; sin distinción de nivel socioeconómico o área geográfica, por lo cual los costos en salud se incrementan y afectan negativamente en el bienestar físico, mental, emocional y económico de la persona, familia y sociedad (2). Debido a esto, la salud mental es más que el bienestar subjetivo, siendo importante para el mantenimiento de esta el desarrollo de autonomía, competencia, dependencia intergeneracional y reconocimiento de la habilidad para realizarse intelectual y emocionalmente, por lo cual la Organización Mundial de la Salud (OMS) difunde una nueva definición de salud mental siendo esta un “estado de bienestar por medio del cual los individuos reconocen sus habilidades y son capaces de hacer frente al estrés normal de la vida, trabajar de forma productiva y fructífera, contribuyendo a las comunidades”, reconociendo que los problemas de salud mental afectan a la sociedad en su totalidad, y no solo a un segmento limitado o aislada de la misma, por lo tanto constituyen un desafío importante para el desarrollo integral (3).