La formación : un proceso complejo que articula las racionalidades lógica, ética, estética y política como elementos transversales al currículo

RESUMEN : La formación se comprende como un proceso consciente que involucra, por un lado, lo particular de cada ser, surge del interior de cada sujeto permitiéndole la creación de imágenes de la realidad, descubrir su lugar en el mundo y sus talentos; pero por otro lado, involucra el ámbito social,...

Full description

Autores:
González Agudelo, Elvia María
Duque Roldan, María Isabel
Tipo de recurso:
Contribution to the magazine
Fecha de publicación:
2019
Institución:
Universidad de Antioquia
Repositorio:
Repositorio UdeA
Idioma:
spa
OAI Identifier:
oai:bibliotecadigital.udea.edu.co:10495/17644
Acceso en línea:
http://hdl.handle.net/10495/17644
Palabra clave:
Plan de estudios
Curriculum
Formación
Training
Estética
Aesthetics
Currículo
Curricula
Formación integral
Transversalidad
Educación transversal
Racionalidad
http://vocabularies.unesco.org/thesaurus/concept49
http://vocabularies.unesco.org/thesaurus/concept84
http://vocabularies.unesco.org/thesaurus/concept1586
Rights
openAccess
License
Atribución-NoComercial-CompartirIgual 2.5 Colombia
Description
Summary:RESUMEN : La formación se comprende como un proceso consciente que involucra, por un lado, lo particular de cada ser, surge del interior de cada sujeto permitiéndole la creación de imágenes de la realidad, descubrir su lugar en el mundo y sus talentos; pero por otro lado, involucra el ámbito social, bajo el entendido de que somos seres sociales e históricos que requerimos de la interacción con los otros, la transferencia entre generaciones de la cultura acumulada, con lo cual cada ser se ubica en su condición histórica. Pero la formación tiene como fundamento la razón y el conocimiento, pero una razón que se compone de múltiples racionalidades (lógica, ética, estética y política), ellas representan una compleja red de relaciones e intersecciones que requieren ser conectadas para ser abordadas como un todo, un todo que en cada momento debe ser interpretado por el sujeto en formación y con ello superar la visión fragmentada de la educación que solo conduce a la formación técnica o a la preparación para el trabajo y dar paso a una formación social, ciudadana, humana y transformadora. Por ello, la transversalidad se erige como el hilo que teje la estructura pedagógica, curricular y didáctica, que posibilita un diálogo de nuevo tipo, rompe jerarquías y mejora la comunicación en los espacios formativos, visibiliza a los diferentes sujetos para que asuman su propia responsabilidad en el proceso de formación.