Caracterización de la interrupción voluntaria del embarazo (IVE) en el período 2010-2017, Medellín

INTRODUCCIÓN: El tema de la interrupción voluntaria del embarazo tradicionalmente ha generado extensos debates, ya que agrupa diversos aspectos que se relacionan con los derechos humanos, sexuales y reproductivos de las mujeres, pero también con la ética y moralidad de las personas, incluyendo como...

Full description

Autores:
Forero Velilla, Melisa
Tipo de recurso:
Trabajo de grado de pregrado
Fecha de publicación:
2021
Institución:
Universidad de Antioquia
Repositorio:
Repositorio UdeA
Idioma:
spa
OAI Identifier:
oai:bibliotecadigital.udea.edu.co:10495/22528
Acceso en línea:
http://hdl.handle.net/10495/22528
Palabra clave:
Aborto criminal
Aborto inducido
Aborto legal
Factores socioeconómicos
Abortion, criminal
Abortion, induced
Abortion, legal
Socioeconomic factors
RIPS (Registro Individual de Prestación de Servicios de Salud)
Interrupción voluntaria del embarazo
http://id.nlm.nih.gov/mesh/D000024
http://id.nlm.nih.gov/mesh/D000028
http://id.nlm.nih.gov/mesh/D000029
http://id.nlm.nih.gov/mesh/D012959
Rights
openAccess
License
http://creativecommons.org/publicdomain/zero/1.0/
Description
Summary:INTRODUCCIÓN: El tema de la interrupción voluntaria del embarazo tradicionalmente ha generado extensos debates, ya que agrupa diversos aspectos que se relacionan con los derechos humanos, sexuales y reproductivos de las mujeres, pero también con la ética y moralidad de las personas, incluyendo como parte fundamental el papel y posición sobre este tema por parte de las religiones en las diversas sociedades. Según datos oficiales de la Organización Mundial de la Salud (OMS) del año 2012, el 41% de los embarazos que ocurren en todo el mundo no son previstos; de éstos, cerca del 26% terminan en abortos (seguros e inseguros) y más del 80% tienen lugar en países en desarrollo, ubicando esta problemática como una de las principales causas de morbi-mortalidad materna según el Ministerio de Salud y Protección Social Colombiano. En el año 2003, la OMS publicó un documento llamado “Aborto sin riesgos: guía técnica y de políticas para sistemas de salud” como respuesta al compromiso adquirido en la Asamblea General de las Naciones Unidas, desarrollada en junio de 1999, donde los gobiernos decidieron que “en circunstancias donde el aborto no sea ilegal, los sistemas de salud deben entrenar y equipar a los proveedores de los servicios de salud y tomar otras medidas para asegurar que los abortos sean seguros y accesibles. Deben tomarse medidas adicionales para salvaguardar la salud de las mujeres que deciden interrumpir su embarazo.” En coherencia con los compromisos adquiridos en la Asamblea General de Naciones Unidas de la cual Colombia es miembro fundador, La Corte Constitucional de nuestro país en el año 2006 revisó la prohibición total sobre el aborto inducido y decidió legalizar el procedimiento en tres situaciones específicas, las cuales son: cuando está en riesgo la vida o la salud de la mujer; por malformación del feto y cuando el embarazo es resultado de una violación, incesto o inseminación artificial no consentida. Es importante recalcar que la sentencia de la Corte se enmarcó en términos de los derechos de las mujeres a la salud y la vida.