El porcentaje de grasa corporal no es un buen predictor de la resistencia cardíaca al esfuerzo en mujeres físicamente activas

Introducción: la práctica de actividades físico-deportivas es fundamental porque tiene efectos beneficiosos sobre la composición corporal y la mejora de la condición física. Cuando se habla de condición física, se debe comprender las capacidades físicas tales como la capacidad aeróbica, resistencia...

Full description

Autores:
García Yerena, Carlos Enrique
Acevedo Mindiola, Andrés Alonso
Bustos Viviescas, Brian Johan
Lozano Zapata, Rafael Enrique
Tipo de recurso:
Fecha de publicación:
2019
Institución:
Universidad Santo Tomás
Repositorio:
Universidad Santo Tomás
Idioma:
spa
OAI Identifier:
oai:repository.usta.edu.co:11634/37282
Acceso en línea:
http://revistas.ustabuca.edu.co/index.php/USTASALUD_ODONTOLOGIA/article/view/2259
http://hdl.handle.net/11634/37282
Palabra clave:
Rights
License
Derechos de autor 2019 UstaSalud
Description
Summary:Introducción: la práctica de actividades físico-deportivas es fundamental porque tiene efectos beneficiosos sobre la composición corporal y la mejora de la condición física. Cuando se habla de condición física, se debe comprender las capacidades físicas tales como la capacidad aeróbica, resistencia muscular, fuerza, velocidad, agilidad, coordinación y movilidad articular, aunque las de mayor relevancia científico-sanitaria son la capacidad aeróbica y la fuerza. En el ámbito físico-deportivo existen diversas pruebas para valorar la condición física o aptitud cardiorrespiratoria de un sujeto. No obstante, son escasos los estudios disponibles que permiten identificar una asociación entre la aptitud cardiorrespiratoria con la composición corporal. Objetivo: determinar la correlación entre la resistencia cardíaca al esfuerzo y el porcentaje de grasa corporal en mujeres físicamente activas. Metodología: se hizo un estudio de tipo correlacional con enfoque cuantitativo que fue desarrollado en Villa del Rosario, Colombia, en un centro de acondicionamiento físico durante el primer semestre de 2017. La muestra a conveniencia estuvo compuesta por sesenta mujeres físicamente activas con un promedio de edad 32,63 ± 13,53 años, peso 61,34 ± 12,10 kg, talla 159,62 ± 79,05 cm, todas asistían de manera regular al centro de acondicionamiento físico durante la jornada de la mañana y tarde. Los participantes aceptaron hacer parte del estudio de forma voluntaria y presentaban un moderado a alto nivel de actividad física, No se incluyeron personas con alguna lesión o patología osteomuscular, metabólica y cardiorrespiratoria. Para determinar el porcentaje graso se aplicó la prueba de impedancia bioeléctrica, la resistencia cardíaca al esfuerzo se estimó por medio de la prueba de Ruffier y Dickson, realizando con un calentamiento de diez minutos de duración. Las pruebas fueron hechas durante una semana en la jornada de la mañana. Seguidamente los datos fueron tabulados y analizados en el programa estadístico SPSS v.22, con un valor de p<0,05 como estadísticamente signifi cativo. Además, se calculó el coeficiente de correlación de Pearson. El presente estudio se desarrolló según los parámetros establecidos para investigaciones con seres humanos como se indica en la Declaración de Helsinki. Todos los participantes firmaron el consentimiento informado por escrito. Resultados: según el índice de Ruffier y Dickson, el promedio fue 10,24 ± 4,71 y el promedio de porcentaje graso fue 26,6% ± 6,92%. Se observó una correlación negativa entre las variables relacionadas (r=-0,33, p<0,01). Conclusiones: existe correlación moderada signifi cativa entre la resistencia cardíaca al esfuerzo y el porcentaje de grasa corporal en mujeres físicamente activas; sin embargo, un menor porcentaje de grasa corporal no representó una mejor resistencia cardíaca al esfuerzo cardíaco.