Reporte de caso clínico: síndromes antifosfolípidos secundario a lupus eritematoso sistémico en mujer joven en el municipio de Armenia, Quindío.
El lupus eritematoso sistémico hace parte del diverso grupo de patologías autoinmunes donde se presentan manifestaciones clínicas heterogéneas, existiendo afectación multisistémica , es muy común que los autoanticuerpos se encuentren presentes muchos años antes de que aparezcan signos y síntomas, se...
- Autores:
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Grueso Pineda, Juan David
Martínez Grueso, Arthur Douglas
Pupiales, David Fernando
Serna Flórez, Jhon
- Tipo de recurso:
- Article of investigation
- Fecha de publicación:
- 2017
- Institución:
- Universidad del Quindío
- Repositorio:
- Repositorio Universidad del Quindío
- Idioma:
- spa
- OAI Identifier:
- oai:bdigital.uniquindio.edu.co:001/6580
- Acceso en línea:
- https://bdigital.uniquindio.edu.co/handle/001/6580
- Palabra clave:
- Lupus eritematoso sistémico
Síndrome antifosfolípido
Nefropatía lúpica
Systemic lupus erythematosus
Antiphospholipids syndrome
Lupus nephropathy
- Rights
- openAccess
- License
- https://creativecommons.org/licenses/by-nc-nd/4.0/
Summary: | El lupus eritematoso sistémico hace parte del diverso grupo de patologías autoinmunes donde se presentan manifestaciones clínicas heterogéneas, existiendo afectación multisistémica , es muy común que los autoanticuerpos se encuentren presentes muchos años antes de que aparezcan signos y síntomas, se observa una prevalencia mayor en las mujeres con una relación 9:1. Hay factores genéticos predisponentes relacionados con deficiencias o polimorfismos en determinados genes, las manifestaciones clínicas y paraclínicas van desde un eritema sobre las eminencias malares, hasta trastornos renales como incremento azoados, proteinuria, trastornos neurológicos como convulsiones o psicosis, trastornos hematológicos como anemia hemolítica entre otros. El lupus en un 25% a 30% se encuentra asociado a síndrome anticuerpo antifosfolípidos secundario y se puede manifestar con eventos tromboticos siendo una complicación frecuente que requiere una terapia inmunosupresora y anticoagulante. El diagnóstico de la enfermedad se realiza en base a criterios unificados por el Colegio Americano de Reumatología, quien postuló 11 criterios diagnósticos (Tabla 1), de los cuales presentar 4 o más establecen el diagnóstico de la enfermedad. El manejo médico está basado en terapias inmunosupresora y recientemente la terapia biológica. En el caso clínico paciente de 21 años cuadro clínico neurológico con hemiparesia Facio-braquial izquierda, parálisis facial periférica izquierda, leucopenia, TAC con lesión hipodensa subcortical frontal derecha compatible con isquemia, reporte de creatinina y nitrogenados elevados, anticuerpos antinucleares positivos, hipocomplementemia, con mejoría clínica luego de terapia con corticoides e inmunosupresores. |
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