El artista de la vida moderna: Un recorrido por el análisis de Baudelaire al artista moderno

Pocos meses antes de morir, había tenido la oportunidad de desayunar con el caricaturista Ugo Barti y a su lado su infatigable compañera Libia Uribe, ya se estaba quedando ciego y ya le costaba dibujar, eso sí, su voz tranquila y su imprudencia se mantenían firmes. Esa mañana estuvo hablando sobre l...

Full description

Autores:
Cubillos Morales, Kristian Eduardo
Tipo de recurso:
Trabajo de grado de pregrado
Fecha de publicación:
2016
Institución:
Universidad Libre
Repositorio:
RIU - Repositorio Institucional UniLibre
Idioma:
spa
OAI Identifier:
oai:repository.unilibre.edu.co:10901/19002
Acceso en línea:
https://hdl.handle.net/10901/19002
Palabra clave:
Arte moderno
Modernidad
Critica de arte
Modern artists
Modern Art
Art and Modernity
Baudelaire's Paris
Baudelaire, Charles Pierre 1821-1867 Critica e interpretacion
Arte de escribir
Arte moderno -- Siglo xx
Baudelaire
Artistas modernos
Arte moderno
Arte y Modernidad
El Paris de Baudelaire
Rights
openAccess
License
http://creativecommons.org/licenses/by-nc-nd/2.5/co/
Description
Summary:Pocos meses antes de morir, había tenido la oportunidad de desayunar con el caricaturista Ugo Barti y a su lado su infatigable compañera Libia Uribe, ya se estaba quedando ciego y ya le costaba dibujar, eso sí, su voz tranquila y su imprudencia se mantenían firmes. Esa mañana estuvo hablando sobre la situación nacional y sobre cine, una de sus aficiones; finalmente, decidió preguntarnos sobre el arte en Colombia, tema que hasta entonces tenía muy pocas referencias, al ver mi desconocimiento, evocó unas cuantas diatribas contra Botero y Obregón, acusándolos de rebeldes aburguesados y recordó a la olvidada Clemencia Lucena como una mujer que fue capaz de romper los esquemas de los artistas de su época: Clemencia fue capaz de hacer arte desde su militancia política. Finalmente, terminó su explicación diciéndome: “Si tú crees que la filosofía en Colombia está en crisis, ¿imagínate cómo están los artistas?”. Y así terminó la conversación, no sin antes despedirse como siempre lo hacía: “Chao filósofo (¡¿yo filósofo?!), vuelve pronto”. No pude volver, la vida juega de esa manera, fue hasta el 14 de marzo de 2013 cuando Ugo Barti, el más grande caricaturista colombiano, como lo nombraron Osuna y Caballero, había muerto: Kosko, Timoteo, el Clubman había desaparecido. Esta investigación, de hecho, tiene una motivación personal: aún tengo cargo de conciencia al no volver. Pero el deseo de saber la situación en la que los artistas viven en la sociedad se profundiza, curiosamente, un año después de la muerte de Armando, perdón, de Ugo Barti. Tuve la oportunidad de asistir a la optativa del profesor Oscar Mauricio Donato titulada Aristófanes, donde pudimos ver la estrecha relación entre arte y política y en una de las exposiciones, por azar tuve la oportunidad de encontrarme con un libro de Charles Baudelaire titulado: “Sobre lo cómico y la caricatura”, donde Baudelaire reivindica la importancia de lo cómico para comprender el comportamiento de los hombres y también la gran influencia que la comedia tiene en las bellas artes como crítica de la sociedad. Ese fue el primer nacimiento de esta investigación. Luego de muchas lecturas sobre Baudelaire, se materializa el interés en esta investigación, indagar cuál es la situación en la que los artistas viven en la sociedad moderna. Baudelaire ha sido testigo de transformaciones fundamentales en la modernidad, especialmente, porque su vida transcurrió gran parte en París, el epicentro mundial del siglo XIX, transformaciones que tienen su origen justamente en el pensamiento moderno y el ascenso de la clase burguesa al poder. Con todo lo que implica, esta situación alcanza al arte y también lo transforma, convirtiéndolo en uno de los bastiones para sostener el proyecto ilustrado y el Capitalismo, una relación entre la racionalidad y la economía. A esta situación le nace una contraparte, un movimiento de artistas que se oponen a la intromisión de las clases dominantes, quieren restituir al artista su papel principal como creadores de obras, se oponen a la Razón y defienden el restablecimiento de los sentimientos y la imaginación. Un movimiento romántico, unos defensores del arte por el arte, cuyo principal representante es el pintor Eugène Delacroix. Baudelaire encuentra en estos dos movimientos grandes inconvenientes: el arte se ha convertido en una mercancía, solo importa la compra y venta de obras artísticas y, en el caso de los románticos, el arte se abstiene de opinar y de tomar como base de sus obras la vida de los seres humanos, es decir, ambos movimientos tienen el inconveniente de que no le enseñan al público en general el disfrute estético. Por lo tanto, Baudelaire propone un nuevo artista, una propuesta que, curiosamente, no nace de la contemplación etérea del poeta sino que ya se encuentra en la sociedad. Un hombre que no es pretensioso como los hombres de Academia, mas no por eso descuida el estudio detallado de los asuntos humanos. Pero lo que fascina a Baudelaire, es un artista que no teme a opinar sobre la sociedad y sus características políticas y económicas, además, que expresa esas opiniones en obras de arte, observa detalladamente la sociedad y a partir de esto toma elementos para sus creaciones, procura acoger cálidamente al público y enseñarle a disfrutar de lo bello de la vida: el arte. En esta investigación se utiliza material iconográfico que se encuentra en el apéndice, esto obedece a que nuestro lector pueda observar con facilidad y con detalle las pinturas a las que Baudelaire se refiere sobre algunos de los artistas que se relacionen a través de los capítulos. Esta investigación también obedece al interés de relacionar el arte y la política, el arte como un elemento fundamental que puede colaborar en los ejercicios y en las decisiones políticas de una comunidad determinada, pero antes que ello es necesario indagar sobre cuál es la situación en la que viven los artistas, porque son ellos quienes realizan las obras y serán quienes harán parte de este proyecto.