Entre extensión y fuerza: una corrección de la mecánica cartesiana a la luz de la dinámica Leibniziana

La teoría físico-metafísica propuesta por Leibniz, probablemente tenga como función reivindicar el concepto y el papel de Dios al interior del mundo, de asignarle un lugar como entidad lógica que contribuye con sus decretos y reflexiones al crear el mejor de los mundos posibles, este es, el más rico...

Full description

Autores:
Fuentes Gutierrez, Juan Sebastián
Tipo de recurso:
Trabajo de grado de pregrado
Fecha de publicación:
2019
Institución:
Universidad Libre
Repositorio:
RIU - Repositorio Institucional UniLibre
Idioma:
spa
OAI Identifier:
oai:repository.unilibre.edu.co:10901/11856
Acceso en línea:
https://hdl.handle.net/10901/11856
Palabra clave:
Física cartesiana
Mecánica cartesiana
Filosofía
Existence of God
The Nature of the Bodies
Leibniz
Descartes
Scientific Systems
FILOSOFÍA
EPISTEMOLOGÍA
METAFÍSICA
FÍSICA
MATERIALISMO
Existencia de Dios
La naturaleza de los cuerpos
Leibniz
Descartes
Sistemas Científicos
Rights
openAccess
License
http://creativecommons.org/licenses/by-nc-nd/2.5/co/
Description
Summary:La teoría físico-metafísica propuesta por Leibniz, probablemente tenga como función reivindicar el concepto y el papel de Dios al interior del mundo, de asignarle un lugar como entidad lógica que contribuye con sus decretos y reflexiones al crear el mejor de los mundos posibles, este es, el más rico en fenómenos y breve en hipótesis. La ciencia dinámica, también trae consigo el advenimiento de un nuevo concepto de sustancia que se resistirá a las categorías pasivas o postulados atomistas que impregnan por doquier las físicas propias del siglo XVII y ven el modelo matemático la explicación última de la realidad. Puede agregarse además que la ciencia dinámica contribuye irreparablemente a conciliar las causas eficientes con las finales, labrando de este modo un saber que trasciende las propiedades materiales y sensoriales. De allí que Leibniz se distancie parcialmente de aquellas físicas que se fundan y sostienen exclusivamente en los postulados mecanicistas, pues como el mismo Leibniz afirma “De dichos axiomas parece que podrá nacer un día el sistema restaurado y reformado de una filosofía intermedia entre la filosofía de las formas y el materialismo, conjuntándolas y conservándolas debidamente la una a la otra” (Leibniz, 2009, pág. 461)De todo lo anterior puede colegirse que la teoría física propuesta por Leibniz bebe de dos corrientes. Dichas corrientes son: la geometría, en lo concerniente al análisis de la extensión o impenetrabilidad, y la dinámica, en lo referente al principio activo al interior de la materia. A su vez, dichas ciencias se encuentran subordinadas a la aritmética y la metafísica. Esta clasificación también resulta importante en la medida que revela otro punto de quiebre frente a la física cartesiana. El cuerpo deja de comprenderse como una realidad esencialmente geométrica o substancial; lo cual no indica que para la comprensión de este se deba hacer caso omiso de la geometría. En el cuerpo son asimilados de manera perfecta lo activo y lo pasivo, la materia y la forma. Ahora bien, ¿por qué no se aceptó la física propuesta por Leibniz al interior el siglo XVII? ¿por qué fue esta física esquiva a sus contemporáneos? Deseo responder al interrogante recién planteado basándome exclusivamente en hechos anecdóticos, en otras palabras, deseo poner los acontecimientos personales más relevantes en la vida de Leibniz al servicio de la presente investigación, sin descuidar bajo ninguna instancia el espacio cronológico elegido para realizar este estudio. Gran parte de los postulados científicos y filosóficos que estuvieron en auge alrededor del siglo XVII pueden agruparse perfectamente en torno a la teoría mecanicista, prueba de ello son los sistemas de Hobbes y Descartes. Otro aspecto que tienen en común los sistemas científicos de dicho siglo es la apropiación del método matemático como saber privilegiado, prueba de lo anterior son las construcciones teóricas de: Galileo, Kepler, Descartes y Newton entre otros. Bajo el marco intelectual anteriormente descrito aparece la figura de Gottfried Wilhelm Leibniz, un hombre que como ya hemos visto subordina el mecanismo a la metafísica y revive las desprestigiadas formas sustanciales.