La educación artística visual desde los documentos escritos de tres exposiciones en el Museo Nacional de Colombia.
El interés por construir un proyecto de investigación en el espacio Museal surge a partir de dos aspectos que fueron la columna vertebral para edificarlo y hacerlo posible: primero por el impulso de explorar la educación artística visual en espacios no formales, y segundo por las experiencias person...
- Autores:
-
Soto Pardo, Camila Andrea
- Tipo de recurso:
- Trabajo de grado de pregrado
- Fecha de publicación:
- 2015
- Institución:
- Universidad Pedagógica Nacional
- Repositorio:
- Repositorio Institucional UPN
- Idioma:
- spa
- OAI Identifier:
- oai:repository.pedagogica.edu.co:20.500.12209/1336
- Acceso en línea:
- http://hdl.handle.net/20.500.12209/1336
- Palabra clave:
- Cultura visual
Curaduría - Museo
Educación artística visual
- Rights
- License
- https://creativecommons.org/licenses/by-nc-nd/4.0/
Summary: | El interés por construir un proyecto de investigación en el espacio Museal surge a partir de dos aspectos que fueron la columna vertebral para edificarlo y hacerlo posible: primero por el impulso de explorar la educación artística visual en espacios no formales, y segundo por las experiencias personales vividas en los museos previas a la construcción de este. Fue a partir de estos antecedentes desde donde surgió este proyecto, con la premisa de que todo lo que uno sueña lo puede realizar, si lo puede soñar. El impulso por conocer los espacios no formales, se desprende de una experiencia que aconteció en primer semestre de la carrera, dada desde un acercamiento al quehacer pedagógico en un espacio formal. El diseño de mi participación allí se llevó a cabo desde el apoyo a las clases, cortando las siluetas para los niños, distribuyendo los materiales de cada sesión y atendiendo las peleas que sucedían en el aula. Esta primera impresión impactó mi modo de concebir los espacios de educación formal, a tal punto de pensar en evadirlos. Es desde allí donde parte mi visión por apostar a la incorporación de otros espacios de educación y por tanto también propiciarlos, dado que si no era posible tenerlos tan fácilmente en los espacios prácticos de la universidad, si se podían buscar fuera del espacio universitario. El primer lugar en el que pensé fue en el Museo1, ya que cuando visitaba el Museo Del Oro o el Museo del Banco De La República me causaba curiosidad conocer que pasaba allí detrás de toda la apuesta visual que podía observar y en la cual me sumergía largas horas. Empecé por enviar mi portafolio a todos los museos de Bogotá, con la ilusión de que a alguno de ellos pudiera abrirme sus puertas, como sorpresa tuve dos respuestas, la primera del Museo Nacional De Colombia en la cual decían que solo era posible vincularse, desde el programa de jóvenes voluntarios y la segunda respuesta venía del Museo De Arte Moderno de Bogotá. |
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