Principales características de los placeres corporales e intelectuales que Descartes identifica para comprender la noción cartesiana del ser humano

El presente proyecto tuvo como objetivo analizar la teoría del placer de René Descartes. Este trabajo surgió de las inquietudes y curiosidades con relación a las explicaciones propuestas por Descartes para explicar los sentimientos placenteros asociados a los objetos que afectan al cuerpo, a las act...

Full description

Autores:
Galindo Flórez, María Fernanda
Tipo de recurso:
Tesis
Fecha de publicación:
2022
Institución:
Universidad del Norte
Repositorio:
Repositorio Uninorte
Idioma:
spa
OAI Identifier:
oai:manglar.uninorte.edu.co:10584/11397
Acceso en línea:
http://hdl.handle.net/10584/11397
Palabra clave:
Descartes, René, - 1596-1650
Placer - Filosofía
Rights
openAccess
License
https://creativecommons.org/licenses/by/4.0/
Description
Summary:El presente proyecto tuvo como objetivo analizar la teoría del placer de René Descartes. Este trabajo surgió de las inquietudes y curiosidades con relación a las explicaciones propuestas por Descartes para explicar los sentimientos placenteros asociados a los objetos que afectan al cuerpo, a las actividades mentales y, en especial, al ejercicio filosófico. De manera que entendiendo cuáles son las características de los placeres corporales e intelectuales y comprendiendo que de ellos depende todo el bien de nuestra vida, logramos ver mejor por qué tomamos las decisiones que tomamos. Para realizar este análisis, utilicé algunas cartas de Descartes a Elisabeth, varios artículos de Las pasiones del alma, la cuarta de las Meditaciones y la sexta de las Meditaciones, para explicar de manera detallada cuales son las características principales de estos dos tipos de placeres. Gracias a este estudio, pude comprender que Descartes valora positivamente el placer, tanto el que depende del cuerpo como el que es propio del alma, pero que también reconoce sus límites como guía para nuestras acciones. Seguir el placer es una inclinación natural, pero debe ir apoyada por el conocimiento del verdadero valor de cada bien. La naturaleza nos inclina a hacer buen uso de nuestras facultades mentales.