Pensar lo más cerca del apocalipsis. Un itinerario

Tengo la íntima convicción de que nuestro mundo va derecho hacia la catástrofe. El camino sobre el cual avanza la humanidad es suicida. Hablo de la catástrofe en singular, no para designar un acontecimiento único, sino un sistema de discontinuidades, de franqueamientos de umbrales críticos, de ruptu...

Full description

Autores:
Palau Castaño, Luis Alfonso
Tipo de recurso:
Article of journal
Fecha de publicación:
2015
Institución:
Universidad de Medellín
Repositorio:
Repositorio UDEM
Idioma:
spa
OAI Identifier:
oai:repository.udem.edu.co:11407/2434
Acceso en línea:
http://revistas.udem.edu.co/index.php/Ciencias_Sociales/article/view/1756
http://hdl.handle.net/11407/2434
Palabra clave:
Rights
License
http://creativecommons.org/licenses/by-nc-sa/4.0/
Description
Summary:Tengo la íntima convicción de que nuestro mundo va derecho hacia la catástrofe. El camino sobre el cual avanza la humanidad es suicida. Hablo de la catástrofe en singular, no para designar un acontecimiento único, sino un sistema de discontinuidades, de franqueamientos de umbrales críticos, de rupturas, de cambios estructurales radicales que se alimentaron los unos de los otros, para golpear con toda la fuerza con una violencia inaudita a las generaciones que venían. Mi corazón se aflige cuando pienso en el porvenir de mis hijos y de sus propios hijos, los que aún no han nacido. Los que esperan que el siglo XXI escapará de los horrores que ha producido el XX, sin duda han olvidado que el acto inaugural —fechado 11 de septiembre de 2001— fue un acontecimiento de una brutalidad inconcebible. Creen sin duda que la ciencia y la técnica nos sacarán de cuidados como lo han hecho en el pasado. Cuando yo era niño, se nos explicaba en la clase de educación cívica que todas las desgracias de la humanidad venían de que los progresos de la ciencia no se habían acompañado de un progreso paralelo de la sabiduría humana. La ciencia era pura, pero los hombres seguían siendo malos. ¡Qué ingenuidad!