Malabares en manada : antología del Grupo Letras

Es mejor no usar desodorante si uno quiere fotografiar a un puma. De la misma manera, a una vaca hay que acercársele por delante. Con los gorilas no se puede entablar contacto visual ni mucho menos sonreírles. Y si una jirafa llega a agachar la cabeza, hay que corresponderle con una reverencia igual...

Full description

Autores:
Grupo Literario Letras
Rivera, Guadalupe
Sosa, Agustín
Naranjo, Daniel
Villa Ángel, Óscar Darío
Patiño, Pablo
Peláez Gaviria, Marta María
Mejía-Gil, María Claudia
Avril, Camila
Torres Jaramillo, Natalia
Echavarría S., Carlos I.
Escobar, Alma
Gómez Mosquera, Adriana
Cárdenas Gómez, Alejandro
TRA
Henao Zapata, Daniela
Saldarriega, Pablo Sierra
Cadavid, Ana María
Morales Ríos, Isabella
Mesa, Adela
Arias Mejía, Juan Daniel
Ramírez Rossi, Julieta
Roncancio Vergara, Estefanía
Echavarría Vásquez, Miguel
Gaviria, Paula Andrea
Tipo de recurso:
Fecha de publicación:
2024
Institución:
Universidad EAFIT
Repositorio:
Repositorio EAFIT
Idioma:
spa
OAI Identifier:
oai:repository.eafit.edu.co:10784/33652
Acceso en línea:
https://hdl.handle.net/10784/33652
Palabra clave:
Creación colectiva
Novela colectiva
Cuentos
CUENTOS COLOMBIANOS
CREACIÓN LITERARIA, ARTÍSTICA, ETC.
ANIMALES - CUENTOS Y LEYENDAS
ANIMALES EN LA LITERATURA
AUTORES COLOMBIANOS
PERSONAJES LITERARIOS
TALLERES LITERARIOS
Stories
Collective creation
Collective novel
Rights
License
Acceso abierto
Description
Summary:Es mejor no usar desodorante si uno quiere fotografiar a un puma. De la misma manera, a una vaca hay que acercársele por delante. Con los gorilas no se puede entablar contacto visual ni mucho menos sonreírles. Y si una jirafa llega a agachar la cabeza, hay que corresponderle con una reverencia igual. Los cocuyos se atraen apagando todas las luces, parándose en medio de un potrero y haciendo con las manos una concavidad que, al golpear una palma contra la otra, produzca un chasquido seco, como un tronco mojado quebrándose. Se debe repetir el sonido en intervalos hasta que, al abrir las manos entre un golpe y otro, el cocuyo ya esté alumbrando dentro de ellas.