Inmunocromatografía y galactomanano como pruebas no convencionales para la búsqueda de aspergilosis invasiva. Una revisión teórica

La aspergilosis invasiva es una micosis con amplia distribución a nivel mundial, producida por hongos del género Aspergillus. Esta entidad constituye actualmente la causa más común de mortalidad relacionada con neumonía infecciosa en pacientes hematológicos, además de ser una de las causas más impor...

Full description

Autores:
Bedoya Vásquez, Leidy Tatiana
Tipo de recurso:
Trabajo de grado de pregrado
Fecha de publicación:
2020
Institución:
Pontificia Universidad Javeriana
Repositorio:
Repositorio Universidad Javeriana
Idioma:
spa
OAI Identifier:
oai:repository.javeriana.edu.co:10554/52099
Acceso en línea:
http://hdl.handle.net/10554/52099
Palabra clave:
Galactomanano
Inmunocromatografia
Pacientes Inmunocomprometidos
Aspergilosis invasiva
Galactomannan
Lateral flow assay
Immunocompromised patients
Invasive aspergillosis
Bacteriología - Tesis y disertaciones académicas
Aspergilosis
Comorbilidad
Revisión de la literatura
Rights
openAccess
License
Atribución-NoComercial-SinDerivadas 4.0 Internacional
Description
Summary:La aspergilosis invasiva es una micosis con amplia distribución a nivel mundial, producida por hongos del género Aspergillus. Esta entidad constituye actualmente la causa más común de mortalidad relacionada con neumonía infecciosa en pacientes hematológicos, además de ser una de las causas más importante de infecciones oportunistas respiratorias y diseminadas en otros pacientes inmunocomprometidos, con linfomas, trasplante de órganos, HIV-SIDA y corticoterapia, por mencionar algunos. Es de destacar que en estos pacientes el factor asociado más importante es la neutropenia (< 500 neutrófilos/mm3) (2,5). Para el desarrollo de la infección a nivel sistémico por Aspergillus, los conidios presentes con gran frecuencia en el ambiente, ingresan por medio de la vía respiratoria, esto por medio de la aspiración, provocando una infección en el tracto respiratorio inferior, por medio de la invasión del tejido pulmonar, el cual presenta poca reacción inflamatoria; los conidios se adhieren a la membrana basal pulmonar y germinan hasta formar hifas tabicadas y ramificadas, debido a las alteraciones y/o disminuciones en la respuesta inmune innata (polimorfonucleares). En aquellos pacientes con daño estructural pulmonar, los conidios llegan hasta los alvéolos, donde se da la formación del aspergiloma (5). Es importante mencionar como la invasión tisular en el paciente, se da a partir de la alteración en el pulmón o los senos paranasales, por la inmunosupresión del huésped y por la invasividad del hongo, llegando a la presentación clínica de una aspergilosis invasiva en diversos órganos tales como piel, sistema nervioso central (SNC), ojos, hígado, riñones, entre otros (5,7,10). El diagnóstico de aspergilosis invasiva en clínica se realiza por medio de la presencia de síntomas respiratorios y nódulos o infiltrados pulmonares observados en las radiografías y tomografías computarizadas, acompañado del apoyo diagnóstico de las pruebas de laboratorio clínico convencionales y no convencionales. Sin embargo, estas pruebas tienen varias limitaciones en términos de sus características operativas y su tiempo de respuesta, estos aspectos han llevado a un retraso en decisiones de tratamiento inmediatas micóticas junto con un diagnóstico inoportuno, que lleva a un aumento en las tasas de mortalidad anuales (10). El diagnóstico convencional se basa en pruebas como la microscopía y el cultivo microbiológico, siendo este último el estándar de oro, sin embargo, este presenta un alto reporte de resultados falsos negativos, asociados a una baja sensibilidad, causada por el uso de medios con antibióticos, dado que algunas especies de Aspergillus se inhiben con la cicloheximida (Actidone), debido a que estos hongos son contaminantes del ambiente, e incluso de vías respiratorias, piel y conducto auditivo externo (1,5,13). Dentro del diagnóstico no convencional de aspergilosis invasiva se destacan los métodos inmunoenzimáticos tipo ELISA como Galactomanano y las pruebas inmunocromatográficas, algunas fundamentadas en la detección de galactomanano tanto en suero como en lavado broncoalveolar y otras fundamentadas en la búsqueda de antígenos de glicoproteína extracelular, la gliotoxina. El ensayo inmunoenzimático muestra una alta sensibilidad (75 al 94%), respecto al cultivo microbiológico (1,15). Sin embargo, se presentan limitaciones en cuanto al tiempo de respuesta y el inicio temprano de la terapia antimicótica, debido a que se requieren grandes cantidades de muestras para ser rentable y su procesamiento en el laboratorio clínico es manejado por lotes una o dos veces por semana (12). En cuanto a la inmunocromatografía la información es reducida, respecto a lo conocido de sus características operativas y desempeño, comparado con galactomanano. Es por ello que existe necesidad de la revisión frente a su desempeño y concordancia con el diagnóstico de aspergilosis invasiva. El galactomanano es un exoantígeno presente en las diversas especies de Aspergillus, su liberación al torrente sanguíneo se relaciona con la presencia de una infección tisular en el paciente, así como la proliferación del hongo (5,7). De igual forma, se ha descrito al galactomanano como un marcador precoz de angioinvasion fúngica, siendo útil para el inicio de la terapia antifúngica en modo preemptivo, incluso en ausencia de manifestaciones clínicas, permitiendo un diagnóstico anticipado de aspergilosis invasiva en un intervalo de 6 a 14 días (22). Es así que su determinación por medio del método de ELISA e inmunocromatografía, acompañado de signos y síntomas clínicos llevan a la implementación de una terapia adecuada temprana (10,17). La gliotoxina es una glicoproteína extracelular ( manoproteína unida a α-1-3, α1-6) secretada durante el crecimiento activo de las especies de Aspergillus, esta puede indicar una infección activa por el patógeno, teniendo en cuenta que su expresión se da de forma constitutiva a partir de la punta de la hifa del hongo, siendo liberada al compartimiento endotelial durante la germinación y la proliferación de hifas, en un periodo de 12 a 14 horas después de la exposición con las esporas, permitiendo así discriminar entre infección hifal invasiva y esporas latentes (23). La determinación de biomarcadores tales como galactomanano y gliotoxina pueden brindar una oportunidad de búsqueda de marcadores precoces de angioinvasión fúngica y de inicio de terapia antifúngica en modo preemptivo en pacientes inmunocomprometidos, incluso en ausencia de manifestaciones clínicas características de una aspergilosis invasiva.