El abandono de bienes en el derecho del consumo

Han transcurrido cuatro (4) años desde que entró en vigencia el Estatuto del Consumidor, Ley 1480 de 2011, encaminado a establecer normas eficaces para la protección de los consumidores; proporcionando armonía en su relación con los productores y proveedores, el cual ha traído consigo también la dignificación del consumidor durante todo el transcurso de la relación, sacándolo de su posición sumisa y abnegada y colocándolo en un nivel superior a tal punto que le dota de herramientas para exigir tanto al productor como al proveedor respeto en los parámetros fijados; y calidad e idoneidad en los bienes y servicios ofrecidos y prestados. Cuenta adicionalmente con un atractivo más, el de intervenir en todas las esferas donde se encuentra inmerso el consumidor en su diario andar, en su diario vivir; quien busca satisfacer constantemente sus necesidades que difieren completamente a la de otras épocas, donde el ritmo de la vida no era tan acelerado y complicado. Se constituye así un gran reto para los empresarios y comerciantes que deben dedicar ahora bastante tiempo y espacio para cumplir de manera eficiente y amable con lo mínimos impuestos por el Estado para no ser sancionados o aún peor desaparecer. Pero al hablar de protección, el estatuto no sólo fijo su mirada en los bienes que se adquieren, también se centró en establecer parámetros en los servicios prestados que suponen la entrega de bienes, es decir cuando el consumidor le entrega al prestador del servicio un bien con el objeto de que cumpla determinada misión, y es ahí donde entramos en un campo que aparentemente se trata en unos cuantos renglones, pero que en realidad merece un estudio profundo y detallado, más aún porque la legislación en sí no es muy clara en su regulación. Hago referencia específicamente al hecho cuando el consumidor abandona el bien que entrega al prestador del servicio; generando una serie de mutaciones jurídicas que será el objeto de estudio de este trabajo, ya que a pesar que en el parágrafo del artículo 18 de la norma en mención refiere que el prestador del servicio debe disponer del bien conforme a la reglamentación que expida el Gobierno Nacional para tal efecto, no existe claridad en ese actuar, por el contrario existe un abismo de gran magnitud. Es aquí donde realmente considero que la Ley 1480 de 2011 en su ambición de proteger al consumidor, coloca al prestador del servicio en un camino sin salida; me refiero entonces cuando la situación se sale de su órbita normal y se presentan fenómenos causados por el mismo consumidor, imponiéndole al prestador obligaciones imperativas y señalándole también prohibiciones en su actuar so pena de hacerlo acreedor de fuertes sanciones. Por consiguiente, con el presente trabajo se busca presentar una solución jurídica para dirimir ese conflicto, en el cual se provea de herramientas equitativas a las dos partes y de reglas que proporcionen claridad a la hora de dilucidar jurídicamente esta situación.

• Autores: Álvarez Garzón, Ángela
• Tipo de recurso: Trabajo de grado de pregrado
• Fecha de publicación: 2016
• Institución: Pontificia Universidad Javeriana
• Repositorio: Repositorio Universidad Javeriana
• Idioma: spa
• OAI Identifier: oai:repository.javeriana.edu.co:10554/38865
• Acceso en línea: http://hdl.handle.net/10554/38865
• Palabra clave: Estatuto del consumidor; Consumidor; Prestación del servicio que suponen la entrega de un bien; Abandono de bienes; Derecho del consumo; Statute of consumer; Consumer; Provision of the service that involve the delivery of a good; Abandonment of goods; Consumer law; Especialización en derecho comercial - Tesis y disertaciones académicas; Abandono de automóviles; Derechos del consumidor
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