Titularización de cartera hipotecaria en el contexto de la nueva ley de financiación de vivienda
La realización del presente estudio constituye un esfuerzo de contribuir al conocimiento, análisis y difusión del tema de la Titularización de Cartera Hipotecaria en el Contexto de la Nueva Ley de Financiación de Vivienda en Colombia. La Ley 546 de 1999 estableció las bases para facilitar la moviliz...
- Autores:
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Hurtado Pardo, Marcela
Quintero Leal, Inga I.
- Tipo de recurso:
- Trabajo de grado de pregrado
- Fecha de publicación:
- 2002
- Institución:
- Pontificia Universidad Javeriana
- Repositorio:
- Repositorio Universidad Javeriana
- Idioma:
- spa
- OAI Identifier:
- oai:repository.javeriana.edu.co:10554/61660
- Acceso en línea:
- http://hdl.handle.net/10554/61660
- Palabra clave:
- Derecho - Tesis y disertaciones académicas
Préstamos hipotecarios - Legislación - Colombia
Titulización de activos - Colombia
- Rights
- License
- Atribución-NoComercial-SinDerivadas 4.0 Internacional
Summary: | La realización del presente estudio constituye un esfuerzo de contribuir al conocimiento, análisis y difusión del tema de la Titularización de Cartera Hipotecaria en el Contexto de la Nueva Ley de Financiación de Vivienda en Colombia. La Ley 546 de 1999 estableció las bases para facilitar la movilización de créditos hipotecarios, con el objeto de proveerle al sistema hipotecario del país, nuevos y eficientes modelos para obtener a través del mercado de capitales recursos para el financiamiento de vivienda. Una de tales formas es un nuevo sistema de titularización, que como lo veremos a lo largo de este estudio, conserva las ventajas fundamentales del sistema tradicional que se había venido utilizando en el país e introduce innovaciones en cuanto a las vías jurídicas para su estructuración, que simplifican y hacen más eficiente su manejo. El nuevo sistema proporcionó los tres elementos que faltaban en el mercado de la vivienda: participación del sector privado en el financiamiento hipotecario, sistemas más eficientes de financiación y una industria constructora más competitiva. Con lo cual se logró recursos financieros suficientes como para asegurar que el déficit de vivienda, pudiera ser paulatinamente disminuido hasta niveles que son normales aún en países desarrollados y además recabar suficiente ahorro como para financiar las nuevas demandas. Los privilegios que consagra la ley de financiación de vivienda acercan como nunca antes a una muy significativa proporción de las familias de menores ingresos a la posibilidad de adquirir una vivienda digna. Además, abre un camino expedito para democratizar el crédito y facilitar un desarrollo integral y formal de las ciudades, hoy en día asfixiadas por los urbanizadores ilegales. La velocidad de este proceso naturalmente se ha acelerado con el impulso que el gobierno le ha dado mediante garantías a los créditos para vivienda de interés social y a la liquidez del mercado secundario. En estos días, cuando un deudor hipotecario paga las cuotas por la casa de sus sueños, logra más que asegurarse un techo. Probablemente esté ayudando a crear una vasta estructura financiera que competirá por comprar su hipoteca y convertirla en derivados que serán comercializados como títulos valores. La mayoría de los compradores probablemente no lo sepan, pero sus hipotecas forman parte de un refinado proceso financiero llamado desarrollo de mercado secundario, que está creando nuevas oportunidades de inversión y reduciendo el costo de la vivienda. |
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