La obligación social y política del estado frente al intercambio humanitario.

Nuestro país ha padecido un penoso y costoso –en vidas humanas, en infraestructura y en términos económicos- conflicto armado interno, el más largo e intenso del mundo, según los expertos. Ante esta situación, muchos gobiernos han tratado infructuosamente de ponerle fin al mismo, no obstante, ante u...

Full description

Autores:
Cardona Garcia, Elsy
Tipo de recurso:
Trabajo de grado de pregrado
Fecha de publicación:
2014
Institución:
Universidad Cooperativa de Colombia
Repositorio:
Repositorio UCC
Idioma:
OAI Identifier:
oai:repository.ucc.edu.co:20.500.12494/8455
Acceso en línea:
https://hdl.handle.net/20.500.12494/8455
Palabra clave:
Intercambio humanitario
Paz
TG 2014 DER 8455
Rights
closedAccess
License
Atribución – No comercial
Description
Summary:Nuestro país ha padecido un penoso y costoso –en vidas humanas, en infraestructura y en términos económicos- conflicto armado interno, el más largo e intenso del mundo, según los expertos. Ante esta situación, muchos gobiernos han tratado infructuosamente de ponerle fin al mismo, no obstante, ante un nuevo intento surgen diferentes posturas, unas radicales, otras más flexibles, pero finalmente todas han culminado en un fracaso, si es que alguna vez se inició algún tipo de proceso. Entre muchas de estas salidas se ha considerado el Intercambio Humanitario.Tanto el Estado colombiano como los grupos alzados en armas –ilegales- han tenido la oportunidad histórica de ponerse al unísono de las normas que regulan los conflictos de carácter no internacional y de aceptar las prohibiciones que estipulan los Convenios de Ginebra y sus Protocolos Adicionales, en lo referente a la toma de rehenes y a los tratos crueles y degradantes. Estos Convenios ya hacen parte del bloque de constitucionalidad. Por otra parte, la misma cláusula Martens –la cual retoma nuestra Constitución Política en el artículo 94- pudo servir de guía para el accionar de ambos actores. No obstante, cada uno observo una conducta contraria a estos principios por lo que el conflicto colombiano tornó a agudizarse cada día. Así, en vez de procurar salidas al mismo, lo único que se logró fue sumar fracasos, sin importar el costo social y político. Por lo tanto, se tratará de analizar la consecuencia más inmediata de los fracasos de estas iniciativas, la cual se traduce en la frustración y un nuevo descontento con el gobierno de turno dadas las esperanzas que han puesto para que finalmente el país pueda encaminarse por la senda del progreso social y económico ya que todos sus esfuerzos, principalmente la inversión económica, se enfocarían en robustecer la industria y el campo. Por eso, es importante tratar de dilucidar cuáles han sido las causas que han entorpecido todos intentos por encontrar una salida a este conflicto interno.