Relaciones político-económicas entre el sector público y el sector privado.

No es solamente nuestro aparato estatal el que necesita reformas, en nuestro sector privado también se requieren cambios importantes, la empresa es uno de los principales instrumentos de progreso económico y técnico, como quiera que constituye una de las fuentes principales de la creación de riqueza...

Full description

Autores:
Barco Vargas, Virgilio
Universidad Cooperativa de Colombia
Tipo de recurso:
Article of journal
Fecha de publicación:
1988
Institución:
Universidad Cooperativa de Colombia
Repositorio:
Repositorio UCC
Idioma:
OAI Identifier:
oai:repository.ucc.edu.co:20.500.12494/47979
Acceso en línea:
https://hdl.handle.net/20.500.12494/47979
Palabra clave:
Empresa pública
Empresa privada
Historia de la economía
Public company
Private company
History of economics
Rights
openAccess
License
Atribución – No comercial
Description
Summary:No es solamente nuestro aparato estatal el que necesita reformas, en nuestro sector privado también se requieren cambios importantes, la empresa es uno de los principales instrumentos de progreso económico y técnico, como quiera que constituye una de las fuentes principales de la creación de riqueza y empleo y el marco más generalizado de la vida cotidiana de quien vive del trabajo asalariado. Además del papel productivo, la empresa constituye un instrumento de innovación y de promoción, ella asume una parte de la investigación básica y casi la totalidad de la investigación aplicada en el mejoramiento constante de los productos y las técnicas de producción suscita necesidades nuevas al mismo tiempo que satisface mejor la demanda existente. La competencia obliga a la empresa a estar en una posición de apertura y de cambio en todos los dominios: tecnológico, comercial, financiero y organizacional, a la vez que creador consumidor a la innovación difunde ampliamente el progreso en todo el cuerpo social. Las empresas en Colombia, como conjunto, requieren cambios importantes en materia de productividad y control de la calidad. Los costos unitarios de nuestra producción nacional no son competitivos y entre nuestros empresarios y trabajadores no se ha desarrollado, sino excepcionalmente, las relaciones de confianza que surge de intereses comunes.