Sin desarrollo agropecuario no hay desarrollo

El país ha ensayado varios modelos de desarrollo, ha aceptado las propuestas de moda en diferentes épocas, ha atendido las insinuaciones de las agencias de desarrollo o centros de estudio que en el mundo han sido y que en su momento se ocuparon de nuestra situación, con los resultados que todos cono...

Full description

Autores:
Rosas Vega, Gabriel
Tipo de recurso:
Book
Fecha de publicación:
1990
Institución:
Agrosavia
Repositorio:
Agrosavia
Idioma:
spa
OAI Identifier:
oai:repository.agrosavia.co:20.500.12324/31994
Acceso en línea:
http://hdl.handle.net/20.500.12324/31994
Palabra clave:
Agricultura aspectos generales - A01 
Cultivo - F01
Ganadería - L01
Agricultura
Producción
Inflación
Pesca
Transversal
Rights
License
Attribution-NonCommercial-ShareAlike 4.0 International
Description
Summary:El país ha ensayado varios modelos de desarrollo, ha aceptado las propuestas de moda en diferentes épocas, ha atendido las insinuaciones de las agencias de desarrollo o centros de estudio que en el mundo han sido y que en su momento se ocuparon de nuestra situación, con los resultados que todos conocemos. Lo único que no ha intentado con firmeza, perseverancia y convocado a ese propósito a la comunidad, es el desarrollo de su potencial rural. incluidas la agricultura, ganadería, pesca y bosques, áreas a las que ni siquiera le reinvertía un porcentaje equivalente al aporte que éstas hacen al producto interno bruto. En mi sentir, esta actitud, este desentendimiento hacia lo que el campo representa para el país, incluidas su cultura y las potencialidades de sus recursos naturales, en especial el hombre rural, ese virtuoso del trabajo perseverante y liberador, es en parte origen de nuestros males, porque además de que desperdiciamos un verdadero patrimonio. invaluable y real. renegamos de nuestro origen y autenticidad y nos vamos detrás de espejismos o quimeras que a nada conducen. cómo pueden comprobar quienes se tomen el trabajo de hacer el balance de los esfuerzos frente a los resultados y los confronten con los logros que hemos obtenido en los cuatro últimos años. cuando se revirtieron las tendencias. se fijaron unas prioridades para el desarrollo agropecuario y se demostró que éste. en su conjunto. responde a los estímulos. Las cifras de los dos últimos años confirman, fehacientemente. la bondad de la política agropecuaria de este gobierno. que desde su comienzo le puso énfasis al sector