Logros y frustraciones de una política agropecuaria 1998-2002

Luis Arango Nieto -fiel a sus ideales y a su amor por el campo colombiano- puso manos a la obra en el propósito de dejar un recuento vivencia¡ de esos cuatro años de logros, y también de frustraciones, y este libro es el resultado de su compromiso y de una experiencia personal en el área que no se p...

Full description

Autores:
Arango Nieto, Luis
Tipo de recurso:
Book
Fecha de publicación:
2003
Institución:
Agrosavia
Repositorio:
Agrosavia
Idioma:
spa
OAI Identifier:
oai:repository.agrosavia.co:20.500.12324/30036
Acceso en línea:
http://hdl.handle.net/20.500.12324/30036
Palabra clave:
Transversal
Rights
License
Attribution-NonCommercial-ShareAlike 4.0 International
Description
Summary:Luis Arango Nieto -fiel a sus ideales y a su amor por el campo colombiano- puso manos a la obra en el propósito de dejar un recuento vivencia¡ de esos cuatro años de logros, y también de frustraciones, y este libro es el resultado de su compromiso y de una experiencia personal en el área que no se puede desconocer. Durante más de 30 años de trabajo en el sector agropecuario institucional, público y privado, ha sido investigador, gerente de una empresa agropecuaria, consultor, directivo del Instituto Colombiano Agropecuario, dirigente gremial, asesor del Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural y Viceministro de la misma cartera, además de ser él mismo un productor agropecuario. Es este camino recorrido el que le permite llevar el hilo conductor entre lo que había ocurrido en anteriores administraciones, los cambios que se introdujeron y su razón de ser, y lo que se dejó planteado para el futuro. A esto se suma el hecho de haber permanecido en el Viceministerio a lo largo de todo el cuatrienio, lo que facilitó que la esencia de la visión, de las polfticas, programas y proyectos tuviera continuidad, aún cuando se presentaran algunos ajustes motivados por el cambio de titular en la cartera ministerial. Vale anotar en este punto que quizás una de las mejores decisiones que tomé en beneficio del campo colombiano fue garantizar la permanencia de los 16 protagonistas en la dirección de las políticas agrarias. Sólo hubo dos ministros de Agricultura y Desarrollo Rural, los doctores Carlos Murgas Guerrero y Rodrigo Villalba Mosquera, quienes, con gran capacidad, liderazgo y empeño, interpretaron y pusieron en práctica los aspectos centrales que dejamos consignados en el Plan de Desarrollo "Cambio para Construir la Paz". Estoy seguro de que ese propósito que alguna vez nos fijamos con Luis Arango Nieto de dejar un testimonio claro, humano y verídico sobre los desafíos, los logros y dificultades del trabajo gubernamental -particularmente en el área agropecuaria- se cumple cabalmente en el documento que hoy queda a consideración de los colombianos.