El cultivo de los pastos en el valle del Sinú y sabanas de Bolivar.

Los suelos del valle del Sinú son fértiles, los pastos responden a las aplicaciones mínimas de 50 kg/ha de N. Los suelos de las sabanas de Bolívar, tienen un alto contenido en K, pero son bajos en N y P. Estas regiones no disponen de riego y solo cuentan con las aguas lluvias. Los pastos más importa...

Full description

Autores:
Escobar R, L.
Tipo de recurso:
Part of book
Fecha de publicación:
1966
Institución:
Agrosavia
Repositorio:
Agrosavia
Idioma:
spa
OAI Identifier:
oai:repository.agrosavia.co:20.500.12324/22577
Acceso en línea:
http://hdl.handle.net/20.500.12324/22577
Palabra clave:
Cultivo - F01
Pastizales
Manejo de praderas
Ganadería y especies menores
Rights
License
Attribution-NonCommercial-ShareAlike 4.0 International
Description
Summary:Los suelos del valle del Sinú son fértiles, los pastos responden a las aplicaciones mínimas de 50 kg/ha de N. Los suelos de las sabanas de Bolívar, tienen un alto contenido en K, pero son bajos en N y P. Estas regiones no disponen de riego y solo cuentan con las aguas lluvias. Los pastos más importantes son el pangola y el pará, que en el valle del Sinú ocupan un 75 por ciento del área total. Se están estableciendo potreros de Angleton en los suelos no inundables. Los pastos guinea y puntero de las zonas altas sostienen una ganadería de cría y levante. Las fincas del valle del Sinú disponen de áreas de terreno demasiado grandes, siendo el promedio general de 60 hectáreas, con los siguientes problemas: dificultuades para el abastecimiento de agua, desperdicio de pasto por pisoteo y lignificación, sobrepastoreo en determinados lugares, aumento de malas hierbas, difícil ejecución del control sanitario de los animales. Se descuída la siembra de los pastos, muchas veces no se tienen en cuenta la clase, variedad y procedencia de la semilla ni la preparación del suelo. La fertilización es práctica poco usada por los ganaderos. La invasión de las praderas por hierbas nocivas o venenosas es un problema grave. No se práctica la rotación de potreros sino cuando se presentan las inundaciones, trasladándose el ganado a las partes altas. Otro problema grave de la región es la presencia de enfermedades y plagas en ciertas épocas del año que limitan altamente la produccion de pasto