Importancia de las leguminosas.

La importancia de las leguminosas se debe a : buen rendimiento, como es el caso de la alfalfa y mayor palatabilidad que las gramíneas, las leguminosas son los pastos más ricos en proteínas y se emplean como proveedoras de éstas en la preparación de las raciones balanceadas, contiene Ca y otros miner...

Full description

Autores:
Michielin de Pieri, A.
Tipo de recurso:
Part of book
Fecha de publicación:
1969
Institución:
Agrosavia
Repositorio:
Agrosavia
Idioma:
spa
OAI Identifier:
oai:repository.agrosavia.co:20.500.12324/28641
Acceso en línea:
http://hdl.handle.net/20.500.12324/28641
Palabra clave:
Cultivo - F01
Leguminosas forrajeras
Composición quimica
Ganadería y especies menores
Rights
License
Attribution-NonCommercial-ShareAlike 4.0 International
Description
Summary:La importancia de las leguminosas se debe a : buen rendimiento, como es el caso de la alfalfa y mayor palatabilidad que las gramíneas, las leguminosas son los pastos más ricos en proteínas y se emplean como proveedoras de éstas en la preparación de las raciones balanceadas, contiene Ca y otros minerales en abundancia, el forraje verde de las leguminosas tienen una buena cantidad de caroteno y por lo tanto un gran valor en vitamina A, también el contenido de vitamina D es bastante alto además tiene, aunque en menor cantidad, riboflavina, niacina, vitamina E y muchas otras, en mezclas con las gramíneas aumentan el rendimiento y el contenido de proteínas de éstas. Este aumento se debe en parte, al N que se incorpora al suelo cuando los nódulos portadores de N y las raíces de las leguminosas se desprenden y descomponen. Existen ciertas bacterias específicas en las leguminosas (Rhizobium leguminosorum), que viven agrupadas en tubérculos o nudosidades pegadas a las raíces de las leguminosas. Estas bacterias tienen la propiedad de fijar el N atmosférico, cediéndolo a la planta en cuya raíz vive en forma de nitrógeno protéico. Las plantas a su vez ceden a las bacterias los otros elementos que necesitan para vivir, de esta manera la planta puede seguir acumuilando N sin necesidad de que exista éste en el terreno. Las raíces, en los primeros tiempos, están desprovistas de nódulos o nudosidades. Las bacterias penetran en las raíces al cabo de unos días de nacidas las plantas. Cuando no se observan en las raíces de las plantas los nódulos, se precisa inocular, esta operación cosiste en regar en el suelo o en la semilla, bacterias específicas de la leguminosa que se va a sembrar. Otro sistema consiste en esparcir tierra de viejos cultivos, que contienen las bacterias, en el campo nuevo que se desea cultivar. Es muy importante en la conservación de la fetilidad del suelo.;Las bacterias de las leguminosas son tan eficaces para utilizar el N del aire, que no sólo contribuyen a mantener la cantidad de N del suelo sino a aumentarlo con solo dejar en el suelo el rastrojo y las raíces con los nódulos. Este efecto no dura por muchos años después del cultivo de la leguminosa. Para mantener la riqueza del suelo es conveniente cultivar leguminosas con cierta frecuencia. Según varios estudios realizados, parece que las leguminosas provistas de nóduilos fijen alrededor de 200 kg de N/año/ha