Desarrollo de estrategias para el manejo sostenible de la Altillanura Colombiana

Los Llanos Orientales de Colombia cubren cerca de 26 millones de hectáreas de las cuales un 53% (14 millones) pertenecen a la Orinoquia bien drenada (terrazas aluviales Altillanura plana y Altillanura disectada) Sin embargo el gran potencial agropecuario lo constituyen cerca de 46 millones de hectár...

Full description

Autores:
Leal Monsalve, Darío
Valencia Ramírez, Rubén Alfredo
Delgado, Hernando
Navas, Gloria
Ramírez, Margarita
Salamanca, Carmen Rosa
Almanza M., Edgar
Bernal R., Jaime
Rey V., Vicente Emilio
Guevara Agudelo, Judith
Quiñones, Luz Mila
Tipo de recurso:
Informe
Fecha de publicación:
1997
Institución:
Agrosavia
Repositorio:
Agrosavia
Idioma:
spa
OAI Identifier:
oai:repository.agrosavia.co:20.500.12324/12321
Acceso en línea:
http://hdl.handle.net/20.500.12324/12321
Palabra clave:
Economía y políticas de desarrollo - E14
Sociología y población rural - E50
Desarrollo sostenible
Historia
Manejo de suelos
Manejo de plagas
Manejo integrado del cultivo
Proyecto de desarrollo
Transversal
Rights
License
Attribution-NonCommercial-ShareAlike 4.0 International
Description
Summary:Los Llanos Orientales de Colombia cubren cerca de 26 millones de hectáreas de las cuales un 53% (14 millones) pertenecen a la Orinoquia bien drenada (terrazas aluviales Altillanura plana y Altillanura disectada) Sin embargo el gran potencial agropecuario lo constituyen cerca de 46 millones de hectáreas constituidas por las terrazas y Altillanura plana actualmente subutilizadas en una ganadería extensiva con pastos de baja calidad nutricional Los suelos de estas sabanas de la Orinoquia se caracterizan por su alta acidez baja fertilidad química baja actividad biológica y débil estructura física que los hace fuertemente susceptibles a erosión y a compactación Aun así estos ecosistemas presentan ventajas comparativas con relación a otras zonas de producción agropecuaria del País por su abundante y buena distribución de lluvias y topografía relativamente plana que facilita la utilización racional de la mecanización como practica agrícola constructora de suelos y no degradativa.